Al insistir en la necesidad de que el Congreso de la República apruebe un acto legislativo que sancione la dosis personal, el Presidente Álvaro Uribe pidió al país no caer en la doble moral de hablar mal del narcotráfico, mientras se consumen drogas.

“Es muy cómodo en reuniones sociales, de ‘social-bacanería’, hablar mal del narcotráfico y consumir coca. Es muy cómodo en reuniones sociales, de ‘social-bacanería’ hablar mal de la corrupción y entrarse a un baño a consumir cocaína. El país no puede, está es una doble moral, ¿dónde está la ética?”, reclamó Uribe Vélez.

La reiteración fue hecha por el Jefe de Estado, mientras hacía un recuento de las medidas que el Gobierno ha adoptado en las últimas horas, en la zona del litoral Pacífico, con el fin de atacar más eficazmente al narcotráfico.

“Es muy grave lo que le denuncian a uno en las escuelas, que en los alrededores de las escuelas se instalan los distribuidores de cocaína, pervierten a los niñitos. ¿Qué les encuentra la Policía a los distribuidores? Les encuentran una dosis personal que no es sancionable”, relató el Mandatario.

La idea de tramitar el acto legislativo para buscar sanciones, dijo, no es para llevarlos a la pena de muerte, pero sí para establecer una escala de sanciones.

“En la primera ocasión una sanción social, de rehabilitaciones. En la segunda ocasión subir la escala, y así sucesivamente”, explicó.

El Presidente Uribe también justifica la sanción, en los esfuerzos que ha desarrollado el país contra el narcotráfico, que tan solo en los últimos tres años han ayudado para expropiar 10 mil bienes.

“En los últimos seis años hemos extraditado casi mil colombianos: extraditados los 14 jefes paramilitares por coca; ‘Simón Trinidad’ de las Farc, extraditado por coca; ‘Sonia’, de las Farc, extraditada por coca. ¿Qué país del mundo muestra ese record? Ninguno”, recordó el Jefe de Estado.

El año anterior Colombia fumigó 130 mil hectáreas de cultivos ilícitos y erradicó manualmente otras 96 mil hectáreas, sin embargo no hay una reducción sustancial de la producción y crece el consumo.

“Entonces no es ético, no es ético hacer este esfuerzo contra la producción, contra el tráfico, contra la criminalidad y simultáneamente ser permisivos en la fuente, que es el consumo”, agregó Uribe.