Afortunadamente el mal momento diplomático con Ecuador parece estar llegando a su fin. El nombramiento de Encargados de Negocios en Quito y Bogota nos permite decir que prácticamente la crisis esta superada.

Espero que, para nosotros, la lección quede bien aprendida . Ningún país y por ningún motivo, sin autorización expresa ,tiene derecho de ingresar tropas al territorio de otro Estado y mucho menos bombardear territorio de otro país. Las garantías que damos serán las que tendremos, en este y en otros casos.

Debemos recordar las veces en que el Presidente Uribe se disculpo públicamente con las autoridades Ecuatorianas , las cuales , inicialmente no aceptaron ni sus explicaciones ni disculpas.

Es momento de celebrar que tenemos un frente de preocupación menos, en cuanto a nuestra política exterior. Me alegro por los habitantes de la frontera tanto Colombianos como Ecuatorianos que hoy pueden reiniciar una hermandad que se hunde en la historia de los tiempos.

Espero que desde hoy y para siempre la frontera con Ecuador sea nuevamente un punto de encuentro y no un lugar de enfrentamiento.