El presidente, Alvaro Uribe, reiteró en las últimas horas su pedido a las autoridades venezolanas para que respeten el debido proceso y la presunción de inocencia a ocho colombianos detenidos en Venezuela bajo acusación de espionaje.

«Nosotros estamos pidiendo el debido proceso, el respeto a la presunción de inocencia para estos colombianos turistas y empresarios pequeños de una fábrica artesanal de helados, quienes ahora fueron puestos presos porque se les sindica de espionaje», aseguró Uribe a la radio Buturama Estéreo.

Se trata de la segunda vez esta semana que el presidente pide públicamente garantías para estos colombianos. La cancillería solicitó el miércoles a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que vele por el respeto a los derechos de estos detenidos.

«Nosotros no le irrespetamos el debido proceso ni a los colombianos ni a los extranjeros», subrayó Uribe.

Posteriormente, durante una intervención en la privada Universidad de la Sabana, Uribe preguntó: «¿Qué tal que se me ocurra a mí que las fotos que me toman con mis compatriotas, ahora que todo el mundo tiene una máquina de fotografía incorporada a un celular, es espionaje?».

De esa forma Uribe aludió al argumento del gobierno venezolano de que a los arrestados se les confiscaron fotografías de infraestructuras eléctricas, puentes y autopistas de varios Estados venezolanos, que podrían ser «objetivos de sabotaje», según el ministro de Interior y Justicia, Tareck El Aissami.

Además cuestionó las «pruebas» que Caracas dice tener para sindicar de espionaje a los colombianos detenidos.

«Uno de ellos, médico. Trabajó en una brigada (militar) colombiana como médico hasta 2002. Otra de ellas, enfermera. Trabajó en una brigada colombiana como enfermera hasta 2004. El médico obtuvo después nacionalidad canadiense y llegaron a Venezuela y están vinculados a una pequeña fábrica de helados. Y entonces, ahora se les acusa de espionaje», dijo.

Expresó también que así como el gobierno es respetuoso de los extranjeros que viven en Colombia, también tiene que cumplir la obligación de velar por los derechos de los compatriotas residentes en otros países.

«A mí me parece muy grave que por salvar apariencias de cortesía diplomática, el gobierno colombiano renuncie al cumplimiento de esas obligaciones», puntualizó.

En sus declaraciones a la radio, el presidente también arreció sus críticas por la falta de respuesta de las autoridades venezolanas en la investigación del asesinato el año pasado de ocho colombianos en ese país.

«¿Qué estamos pidiendo? Claridad en Venezuela sobre los jóvenes colombianos que fueron asesinados allá», dijo.

«Simplemente se lavaron las manos diciendo que eran paramilitares. ¿Dónde están las pruebas? ¿Dónde está el debido proceso? ¿Quién los mató? ¿Fue una operación legítima de Fuerzas Armadas o fue un asesinato? ¿Por qué ese tiro de gracia?, enfatizó.

Uribe evocó así la muerte de ocho colombianos, un peruano y un venezolano en el estado de Táchira (fronterizo con Colombia), en octubre de 2009 que aún no ha sido esclarecido.

El grupo fue secuestrado por desconocidos el 11 de octubre pasado mientras disputaba un partido de fútbol y sus cadáveres fueron hallados dos semanas después.

El jueves, el presidente venezolano Hugo Chávez dijo que prefería «no responder» a los reclamos hechos por Uribe sobre la detención de los ocho presuntos espías. A «estos señores se les están respetando todos sus derechos humanos», aseguró.

Este viernes, la cancillería venezolana emitió un comunicado en el que aseguró que «las declaraciones de Uribe constituyen un intento para minar de forma duradera el posible camino al restablecimiento de relaciones normales con Venezuela».

Venezuela congeló en julio pasado sus relaciones con Colombia, en rechazo a un acuerdo militar suscrito por Bogotá y Washington que Chávez considera como «una amenaza» a la soberanía de su país.AFP