La Secretearía Distrital de Ambiente (SDA) evalúo los gases de 6.137 establecimientos bogotanos, y encontró que los que utilizan combustible en sus procesos productivos generan más del 70 por ciento del total de estas emisiones.

Bogotá está lejos de alcanzar las emisiones de gases efecto invernadero de ciudades como New York, Ciudad de México, Buenos Aires, Santiago de Chile, Sydney y Toronto; sólo supera a otras urbes latinoamericanas como Quito y Lima.

Según el inventario de gases de efecto invernadero de Bogotá elaborado por la Secretaría de Ambiente, la capital emite al año 10.873.331 toneladas de dióxido de carbono (CO2), uno de los gases causantes del calentamiento global que sufre el planeta.

La SDA midió las emisiones de gases de 6.137 establecimientos en Bogotá, como industrias y empresas comerciales e institucionales que utilizan combustibles en sus procesos productivos.

La cifra de emisiones de Bogotá es baja si se compara con los 77 millones de toneladas de CO2 en la ciudad más grande de Australia, los 62 en Santiago de Chile y Ciudad de México, los 58 en la Gran Manzana y los 23 en la capital argentina y Toronto; Quito y Lima están por debajo de la capital del país, con 2,6 y 2,5 millones de toneladas al año.

“En el planeta se emiten 49 gigatoneladas de CO2 al año. De este total, Colombia aporta tan sólo el 0,37 por ciento, con más de 180 millones de toneladas. En cuanto a Bogotá el porcentaje es mucho menor, con 0,02 por ciento. Países como Estados Unidos y China puntean en emisiones de gases efecto invernadero, con el 14,6 y 10,2 por ciento respectivamente”, informó Juan Antonio Nieto Escalante, Secretario Distrital de Ambiente.

Para este estudio, la SDA dividió la capital en cuatro módulos: energía (establecimientos que utilizan combustibles), establecimientos con procesos industriales sin combustión, agricultura y residuos (rellenos sanitarios).

El de energía es que más aporta toneladas de CO2, con el 72,46 por ciento del total de las emisiones (7.879.293 toneladas). Dentro de este grupo, el gran responsable es el transporte terrestre, que emite el 60,15 por ciento (más de 4 millones de toneladas), le siguen el comercio (15,9%), las industrias manufactureras y de construcción (14,2%), las zonas residenciales (6,7%) y el transporte aéreo (2,8%).

La entrada del sistema de transporte masivo Transmilenio ha sido uno de los causantes de la disminución de gases efecto invernadero en Bogotá, según la SDA, desde noviembre de 2000, cuando arrancó TM en la capital, se ha logrado la disminución de 1.177.000 toneladas de CO2.

Por otra parte, la autoridad ambiental del Distrito adquirió recientemente un equipo de medición para determinar el CO2 emitido por los árboles de la capital y así planificar la plantación de especies arbóreas.

Con el IRGA (Infra Red Gas Analyser), la SDA evaluará qué árboles son aptos para ser plantados, dependiendo de la cantidad de CO2 que emitan.

A nivel Distrital, 91 entidades públicas, con 836 sedes administrativas (como colegios y centros de salud) ya tienen Plan Institucional de Gestión Ambiental (PIGA), un instrumento que parte del análisis de la situación ambiental y que contribuye a mejorar el manejo de residuos y la disminución de consumo energético.

En Bogotá, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha expedido 16.688 Certificados de Emisiones Reducidas (CER) por la disminución de estos gases.