Naciones Unidas indicó en un estudio que el 31 de octubre de 2011 la población del planeta llegará a siete mil millones de personas, para subir a nueve mil 300 millones en 2050 y a 10 mil millones a finales del presente siglo.

El hito de los 7000 millones, «constituye un desafío y un llamamiento a la acción y recuerda que el mundo debe actuar ahora», declaró Babatunde Osotimehin, director del Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa), en la presentación en Londres del informe Estado de la Población Mundial 2011.

Según el informe, el crecimiento de la población obligará a hacer frente a problemas como la presión sobre el medio ambiente -debido a una demanda cada vez mayor de recursos naturales- y sobre ciudades en plena expansión.

El informe destaca el papel que podría desempeñar una «inmigración ordenada» como vector de desarrollo para las naciones más pobres, que además se beneficiarían de las remesas, y como «fuente de capital» para compensar la falta de mano de obra en las industrializadas.

«Si se planifica correctamente y se efectúan las debidas inversiones en las personas, el mundo de 7000 millones puede tener ciudades prósperas y sostenibles; fuerzas laborales productivas; poblaciones de jóvenes que contribuyan al bienestar de las economías y sociedades, y una generación de ancianos saludables», explicó Osotimehin.

El documento señala que en las últimas seis décadas la esperanza media de vida aumentó desde los 48 hasta los 68 años, mientras que la mortalidad infantil cayó de 133 por cada mil nacidos vivos a 46 en el período 2005-2010.

Datos contenidos en la investigación revelan que en 2011 Asia alberga al 60 por ciento de la población mundial, mientras que en África vive un 15, y se prevé que a mediados del Siglo XXI los asiáticos sumen cuatro mil 200 millones

En tanto, la población en conjunto de las Américas, Europa y Oceanía, que hoy alcanza los mil 700 millones, crecerá a casi dos mil millones en 2060, nivel que debe mantener hasta 2100.

El texto elaborado por el departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU advierte sobre la persistencia de «grandes disparidades entre distintos países y dentro de un mismo país», en especial en materia de derechos y oportunidades entre hombres y mujeres.

Asimismo, llama a desarrollar una correcta planificación y a realizar inversiones adecuadas en las personas, en beneficio de ellas y de los bienes comunes de la humanidad.

De esa forma, indica, podrán lograrse ciudades prósperas y sostenibles y fuerzas laborales productivas que impulsen el crecimiento económico.

También permitirá contar con poblaciones de jóvenes que contribuyan al bienestar de las economías y las sociedades y una generación de personas de edad que gocen de buena salud y participen en los asuntos de sus comunidades, agrega.

Lograr una población estable es un requisito indispensable para el crecimiento económico y el desarrollo acelerado, sostiene el informe.

El documento de la ONU indica que a pesar de que en el presente las mujeres tienen menor cantidad de hijos que en el decenio de 1960, la cantidad de seres humanos sigue en aumento, y las personas son más jóvenes y más ancianas que nunca.

Sin embargo, apunta, en algunos de los países más pobres las altas tasas de fecundidad perturban el desarrollo y perpetúan la pobreza, mientras que en los más ricos son inquietantes las bajas tasas de fecundidad y de ingresos en el mercado laboral.

El estudio fue elaborado a partir de investigaciones realizadas en China, Egipto, Etiopía, Finlandia, India, México, Mozambique, Nigeria y la ex República Yugoslava de Macedonia.

Santa Fe con agencias