Tras acoger la petición de la Fiscalía el Juez Segundo Penal del Circuito de Santa Marta (Magdalena), con funciones de conocimiento, sentenció a la enfermera Eileen María Reyes Santiago a 37 años de prisión, como responsable del homicidio agravado de un recién nacido.

Los hechos motivo de investigación ocurrieron el 13 de octubre de 2010, cuando la enfermera llegó a la Clínica de la Mujer en Santa Marta y luego de informarse sobre el sitio donde estaba el hijo de Olga Palmas Rivas fue a la sala de cuidados intensivos, donde valiéndose de engaños le sustrajo el bebé a la enfermera jefe y se lo llevó.

Alertados sobre el rapto del menor los guardias del centro asistencial persiguieron a la mujer, quién al verse acorralada ultimó al bebé estrellándolo contra el pavimento.

Durante el proceso la Fiscalía desvirtuó, mediante pruebas de siquiatría forense, la supuesta inimputabilidad de Reyes Santiago. En enero de 2012 el Juez Segundo Penal del Circuito emitió sentido de fallo condenatorio para la procesada.