Por Mauricio Botero Caicedo

La página del “Wall Street Journal Américas”, publicada en varios diarios del país, suele ser seria y objetiva. Sin embargo, la del martes 8 de enero contiene un artículo en contra de la firma Herbalife Ltd., en que al resaltar los argumentos de el gestor de fondos William Ackman que acusa a esta empresa de ser una estafa piramidal, sólo puede ser calificado de inusual y deliberada ‘mala leche’. En primer lugar, en ninguna parte del artículo del WSJA se menciona o se insinúa que el producto de dicha firma pueda ser defectuoso, o no cumplir con las promesas del fabricante. Entonces que sólo por el hecho que Herbalife utilice para vender sus productos un sistema conocido como marketing multinivel (sistema que utilizan empresas como Avon, Amway, y TupperWare) la tilden de estafa piramidal es una grave acusación, y mientras no se demuestre que el producto Herbalife es una farsa, el tildar a esta empresa de estafa piramidal es, como mínimo, una temeridad.

Más bien el que debe aclarar si su objetivo es manipular la acción para obtener réditos extraordinarios es el señor Ackman, que muy posiblemente lo que ha hecho es vender esta acción “short”. (Este es un mecanismo, muy en boga entre los gestores de fondos, en que se pide en préstamo enormes cantidades de acciones en el convencimiento que el precio de la acción va a la baja. De cumplirse el pronóstico, el margen de utilidad entre los precios de compra y venta, pueden arrojar enormes utilidades). Es muy posible que el que realmente esta involucrado en un monumental fraude es el señor Ackman.

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Los foros públicos, como el recientemente celebrado foro de ‘Política de Desarrollo Agrario Integral’ realizado en el pasado diciembre la capital suelen ser un fracaso por dos principales razones: la primera es porque los participantes no suelen representar a los que dicen representar; y la segunda es que dentro del marco constitucional y jurídico vigente, los participantes no tienen la menor potestad para imponer los cambios que dicen querer y poder imponer. Adicionalmente, son un universo tan heterogéneo y disímil, que es casi imposible lograr un acuerdo sobre nada.

Para ilustrar la falta de sindéresis en estos Foros, las Farc, que en dicho foro tuvieron representación directa e indirecta (a través de decenas de ONG’s) utilizando a Iván Cepeda como vocero, afirmaban: “La zona rural del país es el espacio en donde están las causas estructurales del origen campesino de las Farc y del ELN. Donde se han hecho despojos violentos de tierras, desplazamientos forzados, colonización violenta de regiones enteras del país, surgimiento del narcotráfico e incluso, el paramilitarismo.” Pero por dios, que cinismo tan vulgar el de Cepeda, porque en todas y cada una de las calamidades que enumera en su respuesta, empezando por lo despojos violentos de tierras y terminado por el narcotráfico, el principal actor ha sido las Farc. Entonces que el grupo terrorista que hoy en día es el mayor terrateniente del país (habiendo arrebatado más de 800.000 hectáreas de tierra y teniendo a su haber exclusivamente la siembra de coca y minas quiebrapatas) venga a dárselas del adalid de la paz asumiendo la vocería de la sociedad civil, es una farsa monstruosa!