Opinión

¿Y LA FAMILIA QUE?

Carlos Fradique Carlos Fradique-Méndez
Abogado de Familia y para la Familia
DIPLOMADO EN EDUCACIÓN PARA LA VIDA EN FAMILIA (21)
Garantizar la PAZ, LA EQUIDAD COMO INSTRUMENTO DE LA JUSTICIA y LA EDUCACIÓN en las familias, es un avance para proteger el poco de familia que nos queda.
Colombia es un país de profundas desigualdades. Siete de cada diez niños sufre maltrato, cada tercer día se suicida un menor de edad, cada 10 minutos una mujer es agredida por su pareja o expareja, cerca del 50% de las familias vive bajo el límite de la pobreza, estamos entre los últimos del mundo en las pruebas del saber pisa.

La familia es la célula o núcleo fundamental de la sociedad. Sin familia no hay sociedad y sin sociedad no hay país. El Estado es una ficción cuyo fin principal es recaudar impuestos y dinero de los ciudadanos en beneficio de unos pocos privilegiados.

El Presidente Santos en el 2010 se refirió 10 veces a la familia y en el 2014, lo hizo 2 veces. El panorama en el futuro cercano no es alentador. Veamos:

El Estado debe cumplir sus funciones a través del legislativo que hace las leyes, del ejecutivo que debe aplicarlas para realizar el ideal de la justicia a través de la equidad, del judicial que sanciona y corrige injusticias, del control fiscal que debe velar porque se inviertan con diligencia y honradez los dineros públicos, del control de la función administrativa que debe garantizar el cumplimiento estricto de los deberes de los empleados y trabajadores públicos.

El País espera la firma de un pergamino en el que posiblemente se consignarán acuerdos entre el Gobierno y la Farc. No tengo claro que para que pueda haber paz, equidad y excelente educación deba pedirse apoyo, ayuda o permiso a la Farc. Luego vendrá un trámite electoral para revisar esos acuerdos. Es posible que esta gestión dure hasta el 2018. El legislativo espera la aprobación popular de los acuerdos y mientras tanto se empeña en proponer debates de control político entre declarados contrincantes calificados como de ideologías extremas. El judicial está pendiente de unas reformas para fortalecer su poder electoral, incrementar sus salarios y su planta de personal. La Fiscalía, pariente cercana del ente judicial, declara que es mejor no castigar para evitarse juicios que llevarían 100 años. Mientras tanto enfila baterías contra los vigilantes de funcionarios. Contraloría y Procuraduría son objetivo judicial porque han pisado duro y porque han adosado sus decisiones con ideologías censuradas por la izquierda (¿).

Y en este panorama no está la familia. En el 2010 por lo menos se prometió un bienestar básico, con tranquilidad económica, en cada familia colombiana. En la realidad ese bienestar está lejano. Y sobre el empleo digno y la prevención en salud seguimos con los paseos de la muerte de centros de salud a hospitales de quinto nivel. En el 2014 el Gobierno se pregunta: ¿Qué familia no tiene un padre o una madre, un hermano o una hermana, un primo o un amigo que no haya sido víctima del conflicto? Y avizora una COLOMBIA EN PAZ, CON EQUIDAD Y EDUCADA que impulse el crecimiento económico, con más trabajo y más bienestar para las familias colombianas.

Y en concreto ¿Cómo se desarrollará una política de familia, sin Ministerio de Familia? ¿Cómo se educará sin clase de educación para la vida en Familia y con solo clase para el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos? ¿Cómo se minimizará la violencia intrafamiliar si se promueve el matrimonio desechable? ¿Cómo se cumplirán los deberes filiales si se estimula la progenitura infantil y adolescente que son por naturaleza irresponsables?

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