El Ejército de Liberación Nacional, ELN, pidió perdón este lunes por la muerte de dos trabajadores como consecuencia de un atentado terrorista ejecutado el pasado 17 de septiembre al oleoducto Caño Limón -Coveñas en el departamento de Norte de Santander.

En un comunicado, el frente de guerra nororiental confirma que realizó la voladura del Oleoducto Caño Limón Coveñas, en el área de Teorama, y subraya que “en hechos posteriores murieron dos trabajadores de la empresa contratista, encargada de reparar el tubo”.

Según el escrito “no es política” del grupo guerrillero “afectar al pueblo trabajador con su accionar político-militar, por lo que lamentamos estas muertes, producidas por errores personales del mando que estuvo al frente de estas acciones y pedimos perdón por ellas a sus familiares y allegados”.

Finalmente señala que “dentro de nuestra normatividad interna, tomaremos medidas para que en el futuro, estos graves errores no se vuelvan a repetir”.

En el comunicado el grupo guerrillero no establece la forma como fueron muertos ni la identidad de los trabajadores.

Las víctimas respondían a los nombres de Germán Arturo Ariza y Jairo Aguilar y eran trabajadores de la empresa Termotécnica Coindustrial, contratista de Ecopetrol.

Los dos llevaban maquinaria pesada para inspeccionar el oleoducto Caño Limón-Coveñas, que transporta crudo del noreste al noroeste de Colombia, cuando francotiradores del grupo terrorista escondidos en viviendas del sector les dispararon, según lo estableció el Ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, quien agregó en su cuenta en Twitter: “Se trata de un acto atroz en el que se violaron todas las normas del Derecho Internacional Humanitario (DIH) y de los DDHH, además que pone en riesgo la integridad de las comunidades e impide el libre ejercicio del derecho al trabajo”.