–La Procuraduría General de la Nación demandó a la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca y a los alcaldes de los municipios de Sasaima y Albán la adopción de urgentes medidas para solucionar la grave crisis ambiental detectada en esa región, principalmente debido a la contaminación del río Dulce por parte de empresas que operan en la zona y por la carencia de una planta de tratamiento de aguas residuales que disminuya los niveles de contaminación.

El Ministerio Público recordó que durante el pasado mes de septiembre el equipo técnico de la Procuraduría Delegada para Asuntos Ambientales y Agrarios visitó dichos municipios para revisar algunas de las problemáticas ambientales existentes, concluyendo en el informe final que se presentan afectaciones negativas sobre las corrientes de agua de río Dulce, así como en las quebradas La María y Talauta, en Cundinamarca.

Al efecto, la procuraduría llamó la atención sobre el evidente cambio en las características del agua de la quebrada La María después del vertimiento que realiza una de las empresas del sector, la planta de sacrificio denominada “El Vencedor”, y la gran cantidad de aves de carroña que se encuentra alrededor de la misma, además del incumplimiento de los esquemas de ordenamiento territorial en varias de sus disposiciones.

En el comunicado, el Ministerio Público, preocupado por la evidente alteración de los recursos naturales, pidió actuar de manera inmediata y contundente, mediante medidas que podrían incluso conllevar a la suspensión de las actividades productivas generadoras de las referidas problemáticas.