Terminó asalto talibán a escuela en Pakistan con saldo de 130 muertos; muchos niños fueron ejecutados de un balazo en la cabeza
El ataque, que se produjo en la escuela para hijos de militares en la ciudad de Peshawar, en el noroeste de Pakistán, a unos 120 kilómetros de la capital del país, Islamabad, finalizó en medio de explosiones y una balacera entre el Ejército y los extremistas.
Poco después de que las tropas dieran de baja a los terroristas y retomaran el control, fueron trasladados al hospital Lady Reading 23 de los cuerpos de las víctimas y otros 60 a otro centro hospitalario.
El ministro de Información de la provincial, Mushtaq Ghani, dijo que la inmensa mayoría de las víctimas eran estudiantes de la escuela militar, donde acudían niños y adolescentes de entre primer y décimo grado.
El espantoso episodio fue obra de un número relativamente pequeño de milicianos del grupo talibán Tehreek-e, un grupo armado paquistaní que trata de derrocar al gobierno.
Desde el primer momento los talibanes paquistaníes habían reivindicado la autoría del asalto, al tiempo que habían asegurado que no iban a herir a los niños porque su objetivo son los militares que gestionan el centro.
«Nuestros terroristas suicidas han entrado en la escuela. Tienen instrucciones de no herir a los niños y atacar al personal del Ejército» había asegurado el portavoz talibán Muhamad Umar Jorasani, en declaraciones a la agencia Reuters.
Pervez Jattak, ministro responsable de la provincia dijo que todos los muertos eran «niños», pero fuentes hospitalarias habían dicho antes que entre las víctimas había profesores de la escuela, además de un soldado.
En desarrollo del asalto de los talibanesm, un estudiante que escapó y un agente de policía en el lugar dijeron que en un momento dado hubo 200 alumnos como rehenes.
Mohammed Khurrassani, el portavoz del TTP, dijo a la CNN que el ataque fue una venganza por el asesinato de cientos de tribus inocentes durante las repetidas operaciones del ejército en las provincias, incluyendo el sur de Waziristán, Waziristán del Norte y la Agencia Khyber, todas las provincias a lo largo de la frontera de Pakistán con Afganistán.
En efecto, en los últimos meses, el ejército de Pakistán ha estado llevando a cabo una ofensiva terrestre destinada a la limpieza de los militantes en estas áreas, campaña que ha desplazado a decenas de miles de personas.
El noroeste de Pakistán es el hogar de las zonas tribales regidas libremente. Es también una base para los combatientes extranjeros y un refugio para los miembros de los talibanes y otros grupos militantes.
