–Honda consternación causó en la capital financiera del mundo y en Estados Unidos en general la pavorosa tragedia registrada en Nueva York, donde siete niños, de entre 5 y 15 años, murieron calcinados al incendiarse su vivienda, situada en 371 de la avenida Bedford, en un apacible vecindario de judío de Brooklyn.

“Es el peor incendio que hemos visto en muchos años”, dijo el alcalde de la ciudad Bill de Blasio. “Sé que cada neoyorquino siente el dolor. Mi corazón está con esta familia y con esta comunidad”, expresó tras hacer un recorrido por la destruida casa de ladrillos rojos con el equipo de investigadores del Departamento de Bomberos (FDNY).

De acuerdo con medios locales, la madre de los niños, una mujer de 45 años que no fue identificada, saltó de una ventana del segundo piso con una adolescente -que también sería su hija- de 14 años, salvándose de morir.

No obstante, ambas están en estado crítico, la menor en el Staten Island University Hospital y la madre en el Jacobi Medical Center, en El Bronx.

El comisionado del FDNY, Daniel Nigro, indicó, en una conferencia de prensa, que el incendio de dos alarmas comenzó en la cocina de la casa unifamiliar.

Aparentemente, el fuego se originó en la cocina por el mal funcionamiento de un «plato caliente» de los que se usan para mantener templada la comida en el ‘shabat’, día en el que no se puede encender fuego.

Nigro lamentó la muerte de los niños y explicó que se requirieron 100 bomberos, quienes contralaron el fuego a la 1:30 a.m.

“Es una tragedia para esta familia, para esta comunidad y para nuestra ciudad”, sentenció.

La Policía dijo que una menor de 8 años murió en la escena y los otros niños, de 5, 6, 7, 12, 11 y 15 años, fueron trasladados a diferentes hospitales de Brooklyn, en los que fueron declarados muertos.

Nigro destacó que los investigadores del FDNY continúan la pesquisa en la escena, pero todo apunta a que la causa del incendio sería una hornilla sobrecalentada. El único detector de humo de la casa se encontraba en el sótano.

“No había detectores de humo en el primer y segundo piso de la casa que hubieran podido alertar la familia del incendio”, apuntó.

Jim Long, vocero del FDNY, dijo que el último incendio residencial de esta magnitud ocurrió en 2007, cuando 8 niños y un adulto murieron en un edificio de El Bronx habitado, en su mayoría, por inmigrantes africanos. (Con información de eldiariony.com)