–Tres artefactos de gran poder destructivo, sembrados por las guerrillas de las Farc, fueron desactivados por el Ejército en el Huila y dos más en el Caquetá, que habrían podido consecuencias impredecibles entre la población civil, según el reporte militar.

Mientras tanto, en el departamento de Santander, fueron neutralizados tres cargas similares instaladas por elementos del Eln.

El comando del Ejército informó que tropas del Batallón de Artillería n. 9 Tenerife, orgánicas de la Novena Brigada localizaron tres artefactos explosivos de alto poder destructivo, en la vereda Piñuelo del municipio de Neiva, la capital del departamento del Huila.

Uno de los artefactos era tipo cilindro, compuesto por 10 kilos de explosivo anfo, reforzado con cordón detonante, sistema de activación por cable mando y con un poder destructivo mortal aproximado de 50 metros a la redonda.

Esta trampa fue instalada por terroristas de la Columna Móvil Héroes de Marquetalia.

Mientras tanto, en la vereda El Cadillo del municipio de Tello, también Huila, fue ubicado una caneca plástica de 20 litros cargada con 12 kilos de explosivo Anfo y envuelta en 20 centímetros de cordón detonante. En un sector aledaño se halló un cilindro con 10 kilos de pólvora negra y metralla. Ambos artefactos fueron instalados por terroristas del frente 17 Angelino Godoy, señala el comunicado militar.

El comando del Ejército indicó que en lo corrido del 2015 los soldados de la Novena Brigada han hallado y destruido controladamente 18 artefactos explosivos instalados por las Farc.

De otro lado, en la vereda Alto Acacias, municipio de Puerto Rico, en el departamento del Caquetá, tropas del Batallón de Combate Terretsre n.1 Muiscas de la Sexta División, lograron ubicar dos artefactos explosivos improvisados, sembrados por integrantes de la columna móvil Teófilo Forero Castro.

El material localizado fue destruido controladamente por soldados del grupo EXDE de dicha unidad.

Mientras tanto, en el municipio de Convención, en el departamento de Norte de Santander, las tropas del Ejército Nacional destruyeron en las últimas horas tres trampas mortales de fabricación artesanal.

Según el reporte militar, los tres artefactos explosivos fueron diseminados por guerrilleros del frente capitán Francisco, en una clara violación de los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario.

Las minas fueron fabricadas en tubos pintados de color negro y verde de PVC, de ocho centímetros de ancho por 12 cms de largo; en su interior contenían explosivo R1 y estaban contaminadas con materia fecal.