Construyamos Familia Opinión

LOS DERECHOS HUMANOS EN LA FAMILIA

Carlos Fradique Por: Carlos Fradique-Méndez
Abogado de Familia y para la Familia
DIPLOMADO EN EDUCACIÓN PARA LA VIDA EN FAMILIA (46)
La DECLARACIÓN UNIVERSAL DE LOS DERECHOS HUMANOS se promulgó en 10 de diciembre de 1.948 por la Asamblea General de las Naciones Unidas. En 1985, el Congreso colombiano proclamó el 9 de septiembre como el Día Nacional de los Derechos Humanos, en honor a San Pedro Claver, quien murió en esa fecha en el año 1654.

Los derechos humanos se deben aplicar en la familia porque la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana. La familia es la célula, el núcleo fundamental de la sociedad. En la familia se enseñan los valores de respeto que anulan comportamientos de barbarie para que las personas puedan vivir libres del temor y de la miseria, disfruten de la libertad de palabra y de la libertad de creencias. En la familia se siembran las semillas de la amistad entre las personas.

En la familia aprendemos la dignidad y el valor de la persona humana y a garantizar la igualdad de derechos de hombres y mujeres y a elevar el nivel de vida dentro de un concepto más amplio de la libertad; En la familia aprendemos a trabajar porque el trabajo dignifica al ser humano, a reconocer los derechos de la diferencia y a ser tolerantes, a ser justos y equitativos.

Veamos cómo se deben hacer realidad esos derechos en nuestras familias. Hombre y mujer como pareja tienen los mismos deberes y derechos. Todos los hijos son iguales ante la ley. Todos los integrantes de la familia tenemos el derecho sagrado a la vida, a la libertad y a la seguridad.

En la familia no puede haber, ni se debe tolerar ninguna clase de tortura, ni tratos crueles, inhumanos o degradantes.

Los padres deben respetar el debido proceso al sancionar y corregir a sus hijos. El hombre no es dueño de la vida de la mujer y la mujer no debe someterse al marido o compañero.

Los hijos tienen derecho y hasta obligación de salir a cualquier país, especialmente por razones culturales.

Los hombres y las mujeres, a partir de la edad de su madurez, tienen derecho a casarse y fundar una familia y disfrutarán de iguales derechos en cuanto al matrimonio, durante el matrimonio y en caso de disolución del matrimonio.

Debemos entender que la familia es el elemento natural y fundamental de la sociedad y debe ser protegida por la sociedad y el Estado. Los hijos tienen derecho a participar en el gobierno de su familia y deben hacerlo con responsabilidad.

Ante todos digamos que el cumplimiento de los derechos humanos se enseña con el ejemplo. Los hijos son el reflejo, el espejo fiel de sus padres. Los valores que los padres infunden en sus hijos especialmente en los primeros 7 años y hasta los 12 marcan la vida del futuro ciudadano.

En la familia se aprende el derecho al descanso, al disfrute proactivo del tiempo libre, a evitar la ociosidad porque ésta es la madre de todos los vicios.

En la familia se aprende o mejor DEBE APRENDERSE a tener un nivel de vida adecuado que le asegure a los hijos la salud y el bienestar y en especial la alimentación adecuada, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios.

La enseñanza de la prevención de la enfermedad, del riesgo de dañar la vida es fundamental para una buena calidad de vida.

En la familia se deben enseñar los sólidos principios de la progenitura responsable. Sin padres responsables es muy difícil tener ciudadanos responsables.

En la familia se deben formar hábitos de estudio, de formación permanente de tal manera que los ciudadanos entiendan que la educación es la llave del éxito y la mejor arma para evitar la pobreza y las diferentes formas de esclavitud.

En la familia debemos enseñar el valor de la verdad, del compromiso, del cumplimiento del deber, de la responsabilidad, del amor a la Patria, del civismo, de la solidaridad, del respeto a la diferencia, de la tolerancia.

Por estas razones podemos hablar de LOS DERECHOS HUMANOS EN LA FAMILIA Y MI LLAMADO ES A RESPETAR ESOS DERECHOS EN EL SENO DE NUESTRO HOGAR. EMPECEMOS YA.

Bogotá, 7 de septiembre de 2015.

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