Recompensa de $100 millones ofrece el Ejército para prevenir actos terroristas en el país
La medida fue adoptada ante el llamado «paro armado» declarado por ese grupo terrorista para conmemorar la muerte del cura Camilo Torres, quien, como se sabe, se quitó la sotana para abrazar la doctrina marxista-leninista e incorporarse al Eln, pero murió en su primer «combate», al participar en una emboscada a una patrulla militar en Patio Cemento, departamento de Santander, el 15 de febrero de 1966.
El comando del Ejército Nacional anunció que habilitó la línea telefónica 147 en todo el territorio nacional para denunciar cualquier acción que atente en contra de la seguridad.
«El Ejército Nacional está ofreciendo una recompensa de hasta 100 millones de pesos a las personas que brinden información que permita prevenir o neutralizar actos terroristas, que pretenden atentar en contra de la población civil, organismos de seguridad y la infraestructura energética, petrolera y vial del Estado», precisa el comunicado.
Agrega que ante la amenaza de las organizaciones terroristas al margen de la ley, los soldados del Ejército Nacional se encuentra adelantando de forma directa Operaciones Militares con el objetivo de prevenir los actos delictivos de estas organizaciones ilegales y así proporcionar condiciones de seguridad a los colombianos.
«La línea telefónica 147 del Gaula militar está dispuesta en todo el país para que actué de manera gratuita, las 24 horas del día, recibiendo cualquier tipo de información con absoluta reserva», subraya.
Las tropas del Ejército están alertas para seguir manteniendo el orden y la tranquilidad en el país, por esto, invitamos a los colombianos de bien a realizar cualquier tipo de denuncia frente a actos sospechosos, concluye el comunicado.
La guerrilla del Eln anunció un «paro armado» entre el 14 y el 17 de febrero con motivo de los 50 años de la muerte del cura Camilo Torres.
En desarrollo del mismo ha ejecutado dos atentados terroristas en el Cesar. En uno de ellos derribó una torre del sistema de interconexión y dejó sin fluido a los municipios de Aguachica y Gamarra y en Pailitas detonó un artefacto en una alcantarilla que afectó la carretera.
Además, en la vía Medellín-Quibdó, quemó un bus de servicio intermunicipal.
En la región del Catatumbo, Norte de Santander, lo mismo que en Arauca, el transporte público está paralizado por el temor a sufrir ataques similares.
