La historia profundiza en la secuela de Descendientes, la película de éxito global rotundo, y cuenta cómo los hijos adolescentes de los villanos más malvados de Disney (Mal, Evie, Carlos y Jay) intentan encontrar su lugar en el idílico reino de Auradon.

Cuando la presión por ser una figura perfecta de la realeza agobia a Mal, ella regresa a sus raíces malvadas en la Isla de los Perdidos, donde su archienemiga Uma (la hija de Úrsula), se autoproclamó reina de la deteriorada isla.

Uma, todavía resentida por no haber sido elegida por Ben para ir a la secundaria Auradon con los otros Hijos de los Villanos, incita a su banda de piratas —que incluye a Harry, el hijo del Capitán Hook, y a Gil, el hijo de Gastón— a romper la barrera que separa la Isla de los Perdidos y Auradon, y así dar rienda suelta a todos los villanos encarcelados en ella de una vez y para siempre.