Bogotá

Jóvenes requieren verdaderas oportunidades laborales y educativas

El concejal Jorge Torres le hizo un llamado a las autoridades distritales para que diseñen y pongan en práctica programas de trabajo orientados y dirigidos específicamente a población juvenil y de esta forma lograr alejar a los adolescentes de las redes delincuenciales que hoy afectan a la ciudad.

“La gran deuda social que tiene Bogotá es con los jóvenes porque no se han atendido directamente o los programas que se han diseñado para ellos, han fracasado. Son 411 mil jóvenes que están en Bogotá sin trabajo ni estudio y cuyas ofertas que reciben provienen es de la ilegalidad”, señaló el concejal Torres en el marco del debate sobre delincuencia juvenil efectuado en el cabildo distrital.

Con estadísticas del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Torres se refirió a que el 80% de los delitos cometidos por jóvenes están correlacionados con la oferta laboral que genera el mundo de la ilegalidad. Dichos delitos son: Hurto, hurto calificado, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, así como fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o municiones.

“De un total de 6.057 casos que se presentaron en 2.015 con jóvenes, 4.834 corresponden a esos delitos que tienen que ver con oferta laboral desde la ilegalidad”, expresó el concejal.

Y muy alarmado también se pronunció el concejal frente a los homicidios porque en ese año 2.015 jóvenes generaron 52 homicidios, mientras en 2.016, con corte a septiembre, ya iban 53. “No podemos permitir que en Bogotá se esté formando una generación de posibles sicarios o asesinos a sueldo que pongan en riesgo la vida y seguridad de los bogotanos. Urgen acciones contundentes para enfrentar esta problemática”, insistió el concejal Torres.

Oferta laboral es carreta

El concejal Torres calificó como carreta lo hasta ahora hecho en el propósito de emplear laboralmente a los jóvenes: “No podemos seguir teniendo políticas de juventud si no se ofrecen oportunidades reales de inserción laboral, el resto es carreta porque los jóvenes requieren devengar para su sustento diario, lo cual se lo está facilitando es la delincuencia”.

En su intervención el concejal además señaló que para cargos básicos como archivista, auxiliares y operarios, a los jóvenes se les está pidiendo experiencia “entonces el Distrito no está generando políticas afirmativas que le permitan vincularse laboralmente, adquirir experiencia y así crecer en el mundo laboral”, dijo.

También considera Torres que los proyectos estratégicos de la ciudad deberían tener una correlación con la formación y la generación de oportunidades laborales para jóvenes. “No los estamos preparando para que puedan aprovechar el ‘pico’ de empleos que generarán los proyectos de infraestructura que se van a realizar con el cumplimiento del Plan de Desarrollo. Creemos en los cambios y transformaciones planteadas en cuanto a infraestructura pero estas deben ir de la mano con opciones laborales para esta población”.

En cuanto a educación superior el concejal recordó la meta establecida en el Plan de Desarrollo la cual definió la creación de 35 nuevos cupos diseminados así: 15 mil en convenios con el Sena, 12 mil con el portafolio de becas de la Secretaria de Educación y 8 mil en la Universidad Distrital.

“Hoy existe una escasa oferta dejando a cientos de miles de jóvenes sin la oportunidad de formarse como técnicos, tecnólogos o profesionales con lo cual se le facilita el camino a los delincuentes que explotan y se aprovechan de los adolescentes y jóvenes en especial de los sectores más populares de la ciudad”, enfatizó Torres.

Dentro de su exposición, Torres así mismo abogó por las apuestas de prevención que calificó como fundamentales y por la necesidad de aumentar los presupuestos del Idipron y de la Secretaría de Integración para temas de juventud, que actualmente son precarios para de esta forma “encontrar caminos que aseguren recursos para potenciar la educación superior pública en la ciudad”.