Ciencia y Tecnología

Descubren la verdadera causa del envejecimiento y la muerte

–El organismo humano envejece y muere debido a la influencia indirecta de los parásitos en el proceso evolutivo de los seres vivos, afirma un estudio llevado a cabo por Richard Y. Chin, de la Universidad de California en San Francisco, EEUU, y publicado en la revista especializada bioRxiv.

Según el científico, las especies están involucrados en una ‘carrera armamentista’ continúa con sus parásitos.

Este fenómeno es conocido también como el efecto Reina Roja. Gracias a la reproducción sexual, los genes de una población se mezclan, tras lo cual la próxima generación obtiene genes capaces de ayudarle en su futura lucha contra los parásitos.

Por su parte, los organismos que se reproducen de forma asexual —como las esponjas o gusanos— no son capaces de transmitir las mutaciones benéficas.

De este modo, los parásitos se adaptan a los mecanismos de defensa de la especie y con esto tienen la posibilidad de afectar a las próximas generaciones.

En general, el envejecimiento y la muerte reducen el número de especies, lo que obstaculiza la transmisión de enfermedades infecciosas. Asimismo, ayuda a mantener la diversidad genética, también algo muy importante para la lucha eficaz contra los parásitos.

En lo que respecta al envejecimiento, también puede explicarse con el efecto Reina Roja. Según explica el científico estadounidense, en algunos períodos de la evolución, los organismos se hacen inmunes a los parásitos. Los últimos, por su parte, obtienen una ventaja entre los períodos de la aparición de nuevas cepas. El envejecimiento más rápido ayuda a una especie a encontrar el modo óptimo de protegerse de los parásitos.

En otras palabras, el envejecimiento y la posterior muerte son mecanismos adaptativos contra las infecciones. Para ilustrar su teoría, el científico desarrolló un modelo que mostraba la dinámica de poblaciones de parásitos y sus ‘amos’ durante un ciclo de 500 años. Cada población —que consistía en 100 especies— tenía tres fenotipos, cada de los cuales era inmune a uno de los tres fenotipos del parásito. Al mismo tiempo, estaba parcialmente inmune al segundo y totalmente susceptible al primer fenotipo del próximo ciclo.

Al examinar 1.000 ciclos, el científico llegó a la conclusión de que hay una conexión directa entre la esperanza de vida y la inmunidad a los parásitos. (Información de la agencia Spunik)