De acuerdo con el estudio 2020 Women on Boards,en el 2015 el 55% de las empresas que quedaron por fuera de la lista Fortune 1000 no tenían participación femenina en sus juntas directivas.

Estas cifra contrasta con la participación del 18.8% de mujeres que conformaban los consejos directivos de más del 80% de las empresas del listado.

En Colombia, solo el 7% de las mujeres logran llegar a un cargo de directivo, lo que pone en evidencia además patrones machistas dentro de las entidades.

“Estudios afirman que las mujeres ocupan tan solo el 18% de las funciones de alto nivel de liderazgo en América Latina y más de la mitad de las empresas no tienen representación femenina en ese nivel”, aseguró Zulay Pérez, líder de Servicios Legales de KPMG en Colombia.

A lo anterior, agregó: “todavía hay una tendencia a creer que ellas no lo pueden hacer, que no están capacitadas o que sus labores domésticas les impiden invertir el tiempo que se requiere para estos puestos gerenciales”.

El estudio destaca que es necesario romper paradigmas en el sector empresarial pues pese a los diferentes roles que debe cumplir la mujer de: madre, ama de casa y profesional, cada vez más esta población se capacita para superarse laboralmente.

“El tema de la diversidad no es solo poner a una mujer en la junta directiva sino apoyar sus ideas, acompañarla y tener en cuenta su opinión además de buscar espacios donde esta población aprenda, se capacite y mejore su posición dentro de la empresa”, comentó Pérez.