Un total de 706 habitantes de los municipios de San José del Fragua, Milán y El Paujil (Caquetá) se beneficiaron con la visita de la Unidad Móvil de Atención y Orientación a Víctimas del Conflicto Armado. Estas personas recibieron asistencia en temas como el Acuerdo Final de Paz, especialmente en lo relacionado con el Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición (SIVJRNR); y también en lo referente a los beneficios que ofrece la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras (Ley 1448 de 2011).

A través de la Dirección de Justicia Transicional del Ministerio de Justicia y del Derecho, y gracias al apoyo logístico de un equipo de profesionales de diversas disciplinas, estos ciudadanos cuentan ya con información actualizada acerca de sus derechos y de las rutas de atención y reparación que la Ley de Víctimas les reserva para conseguir el derecho a la verdad, la justicia y la reparación.

Fueron 468 mujeres y 238 hombres (entre ellos 116 adultos mayores, 57 personas en condición de discapacidad y 37 de comunidades indígenas y afrocolombianas) los que se beneficiaron con la oferta institucional de entidades como la secretaría departamental, y de otras del orden nacional como la Unidad de Tierras, el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA), la Unidad Nacional de Protección (UNP) y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).

En apoyo a la implementación del Acuerdo Final de Paz y bajo el lema ‘12 meses, 12 derechos y 12 puntos claves del Acuerdo de Paz’, los ciudadanos de estos municipios caqueteños pudieron, gracias a la Unidad Móvil, conocer el contenido de dicho acuerdo, su alcance, las implicaciones para los derechos de las víctimas y las nuevas instituciones como la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición (CEV) y la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD).

Así las cosas la Unidad, que desde 2012 presta sus servicios a la población de los territorios más alejados de la geografía nacional, sigue valiéndose de elementos pedagógicos con el fin de empoderar a las víctimas del conflicto armado. Esto en el marco del nuevo sistema de justicia transicional en la etapa de posacuerdo.