Bogotá

Autoridades rechazan e investigan asonada por noticias falsas en Ciudad Bolívar

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El Secretario de Seguridad, Convivencia y Justicia, Jairo García, y el Comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, Mayor General Hoover Penilla visitaron la localidad de Ciudad Bolívar tras los hechos de violencia donde una persona murió a manos de la misma comunidad.

El Secretario de Seguridad rechazó estos brotes de violencia, asegurando que la comunidad no debe tomarse la justicia por mano propia. «Le pedimos a la comunidad tranquilidad; la Policía y el Distrito estamos haciendo todo el esfuerzo para esclarecer cualquier información que este circulando. Evidentemente hay personas interesadas en generar pánico e intranquilidad, por eso lo más importante, es una decisión individual de evaluar la información que está llegando por redes sociales antes de replicarla».

“Esto es lo que nos trae el mal uso de las redes sociales”

Según las autoridades, a la fecha no se tiene ninguna información de secuestros o hurtos de menores de edad en la ciudad, como lo quieren hacer creer algunas cadenas falsas que circulan por redes sociales.

Por su parte, el comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, General Hoover Penilla, anunció que ya se avanza en las investigaciones por estos disturbios. Hay 8 personas identificadas e incluso una ya indiciada.

“Esto es lo que nos trae el mal uso de las redes sociales: cualquier persona puede utilizar para difamar o para crear caos o zozobra. El llamado es a hacer la denuncia y esperar la verificación correspondiente por medio de los canales institucionales”, afirmó el General Hoover Penilla.

En las últimas semanas en Ciudad Bolívar se han presentado denuncias por redes sociales sobre supuestos raptos o desapariciones de niños. No obstante, la Policía Metropolitana ha verificado y desvirtuado los seis casos que han circulado.

Según el General Penilla, un llamado al cuadrante alertó de un ataque a un grupo de personas, cuando la Policía llegó a atender el caso se encontró con un motín. De inmediato las autoridades protegieron a las siete personas que estaban siendo agredidas, señaladas por la multitud como los responsables de la desaparición o rapto de menores, pero en los hechos también resultaron heridos cuatro policías.