Este lunes la Fiscalía General definió la situación jurídica del general retirado Mauricio Santoyo, ordenando su detención como presunto responsable de concierto para delinquir agravado y desaparición forzada de personas.

La detención del exmilitar se adelantó a su llegada de los Estados Unidos, donde cumplió 13 años de cárcel por ayudar a los grupos de autodefensas a sacar cocaína de Colombia a territorio estadounidense.

Santoyo deberá permanecer en un centro carcelario en tanto avanzan las indagaciones en contra suya como presunto autor del delito de concierto para delinquir agravado y coautor de desaparición forzada de personas agravada.

Según las autoridades, las desapariciones de Claudia Patricia Monsalve Pulgarín y Ángel José Quintero Mesa, de la Asociación de Familiares de Detenidos y Desaparecidos (Asfaddes), estarían relacionadas con varios homicidios y crímenes ocurridos en Medellín (Antioquia) entre 1997 y 2001, por los que han sido procesados algunos efectivos del entonces Gaula Rural de la Policía Nacional.

Tanto Monsalve Pulgarín como Quintero Mesa, fueron reportadas como desaparecidas el 6 de octubre de 2000, en un sitio público conocido como La Playa, en el centro de Medellín (Antioquia).

Exmiembros de grupos de autodefensa que aspiran ingresar a la Ley de Justicia y Paz se atribuyeron estas desapariciones y revelaron la complicidad con integrantes del entonces Gaula Rural de la Policía.

Como se recuerda, a Santoyo la Fiscalía lo vinculó en 2015, junto con el también oficial Rito Alejo del Río, después de conocer unas declaraciones que rindió desde Estados Unidos Diego Fernando Murillo, alias ‘Don Berna’, diciendo que los exoficiales presuntamente tendrían relación con los grupos paramilitares de la época, y habrían participado en una presunta estrategia de desviación de la investigación por el crimen.