Bogotá

Buscan prohibir consumo de drogas y licor en parques con Proyecto de Acuerdo

Radio Santa Fe CM

El Concejal Marco Fidel Ramírez radicó un Proyecto de Acuerdo “por medio del cual se garantizan los derechos prevalentes de los niños, niñas y adolescentes (NNA), adultos mayores, personas en discapacidad y mujeres en estado de gravidez con respecto al consumo de bebidas alcohólicas y sustancias psicoactivas en los parques de la ciudad, como control, preservación y defensa del patrimonio ecológico”.

La iniciativa del Concejal de la Familia busca la prohibición del consumo de drogas y licor en este tipo de espacios públicos, luego de que la Corte Constitucional declaró inexequibles expresiones de los artículos del Código de Policía que -precisamente- sancionaban el consumo de estas sustancias en parques y otros sitios abiertos.

De ahí que el objeto del Proyecto de Acuerdo es “proteger los derechos de especial reconocimiento constitucional como son los derechos de los NNA”, según lo establece el Art. 44 de la Constitución Política de Colombia, y los derechos de las demás poblaciones de especial protección.

Ramírez fundamenta su propuesta en la competencia constitucional en cabeza de los Concejos Municipales de expedir normativa para el control, la preservación y la defensa del patrimonio ecológico de sus territorios, conforme al Art., 313 Numeral 9 de la Constitución, función que también incluye el propio Código de Policía (Parágrafo 1 del Art. 12).

Así, la prohibición del consumo de bebidas alcohólicas y sustancias psicoactivas en los parques se debe a que hacen parte del patrimonio ecológico y dicha medida contribuye a que sean preservados.

En el Proyecto de Acuerdo, el Concejal de la Familia recuerda cómo el pensador italiano Francesco Tonucci, autor del libro “La Ciudad de los Niños”, sostiene que el indicador de una ciudad sana es la presencia de niños jugando y paseando por sí solos; de lo contrario, es una ciudad enferma.

Justamente la propuesta del cabildante, que va más allá de medidas restrictivas que podrían legitimar indirectamente el manipulado “derecho a la libre personalidad”, apunta a la prohibición del consumo de drogas y alcohol en defensa de una ciudad que reconozca realmente la prevalencia de los niños, niñas y adolescentes.