Bojayá sepulta por fin las víctimas de masacre ejecutada por las Farc hace 17 años
–Por fín, tras 17 años y ocho días de duelo, cantos, alabaos y gualíes, los habitantes de Bojayá sepultan este lunes los restos mortales de sus seres queridos masacrados por las Farc el 2 de mayo de 2002. Será un sepelio colectivo, que se cumplirá al medio día.
La víspera en un emotivo acto realizado por más de 600 familias, en el polideportivo de la población, el sentimiento brotó en cada expresión de los cantaores y cantaoras que honraron por último día las decenas de cuerpos de las víctimas de la Masacre de Bojayá que yacen en cajones marrones y blancos para significar los nuevos colores de su esperanza.
Los rituales fúnebres, propios de la cultura afro, estuvieron acompañados alabaos, rezos y gualíes. Los Alabados son cantos ancestrales conocidos como el arte de cantarle a los muertos, de despedirlos y acompañarlos en su paso a otros mundos donde residen los espíritus de sus ancestros. Los gualíes son cantos para acompañar a los niños que fallecen y el levantamiento de tumba es la finalización de la novena y se hace a los adultos fallecidos.
Con cantos y alabaos las familias de #Bojayá despiden, luego de 17 años, los restos mortales de las víctimas del 02 de mayo. pic.twitter.com/PIKDNcV6Qo
— Comisión de la Verdad (@ComisionVerdadC) November 17, 2019
Con este acto, la comunidad de Bojayá llevó a cabo lo que denominan “La Última Noche”, el acto de velorio a sus difuntos antes del “Entierro Final” que se realizará este lunes en el cementerio de la población.
La Unidad para las Víctimas asistió a estos actos para apoyar y acompañar a los familiares dentro del proceso de reparación, entendiendo el significado que tiene para cada uno de ellos y así dejarles el mensaje que se seguirá trabajando unidos por las víctimas.
?| A esta hora continúa en #Bojaya la velación de las víctimas mortales de la masacre del 2 de mayo del 2002. La voz de las cantadoras y cantadores acompañarán a los sagrados espíritus con alabados y gualíes durante toda la noche y madrugada. #UnidosPorBojayá pic.twitter.com/obdkSQYefm
— Unidad Víctimas (@UnidadVictimas) November 18, 2019
Las familias afrodescendientes de Bojayá, en el departamento del Chocó, recibieron el lunes 11 de noviembre los cuerpos reconocidos de 72 personas, de las cuales 45 eran niñas y niños, que murieron hace 17 años luego que un cilindro bomba impactara la iglesia donde se refugiaban, causando una de las peores matanzas de civiles del conflicto armado colombiano.
Los restos, que fueran exhumados en 2017, regresaron en cofres blancos -para los cuerpos infantiles- y marrones -para los adultos- al templo San Pablo Apóstol, mismo lugar que la entonces guerrilla de las Farc hizo volar en medio de un enfrentamiento con paramilitares de las llamadas autodefensas unidas de Colombia (AUC) en la disputaba por el control territorial.
#AEstaHora #Bojayá #Chocó #SomosIglesia
"Bojayá es un ejemplo que nos invita a que las víctimas sean el centro del proceso de construcción de paz y así lo reconozcamos todos". Monseñor Héctor Fabio Henao, Director del Secretariado Nacional de Pastoral Social. @ComisionVerdadC pic.twitter.com/Q7R1K6fF8b— Cáritas Colombiana (@pastoralsocialc) November 17, 2019
Pero el duelo de los habitantes de Bojaya no concluye este lunes con el entierro colectivo.
Tras sepultar a las víctimas, lo bojayenses realizarán la tradicional novena por los difuntos.
Para este martes 19 de noviembre está prevista una ceremonia denominada «El renacer de la esperanza”, que incluye la siembra de un árbol por cada víctima en el lugar de memoria.
Y el 26 de noviembre, a las 7:00 a.m. se rendirá un Informe general del acto de despedida espiritual de los cuerpos y entre 8:00 p.m. – 6:00 a.m., se rezará la última novena y el levantamiento de tumbas en memoria de las víctimas.