La canciller española, Arancha González, ratificó el respaldo de su país al acuerdo de paz colombiano y a las instituciones creadas bajo ese pacto, durante un reunión en Bogotá con magistrados y miembros del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición.

Para la ministra de Exteriores la «labor» que ejercen la Comisión de la Verdad, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y la Unidad de Búsqueda de los Desaparecidos es muy «importante», en el propósito de «aclarar el pasado» y «construir el futuro» de los colombianos y las colombianas.

González recordó que la labor encargada en el postconflicto a esas instituciones «no ha terminado» y por el contrario «va a durar», dado que la búsqueda de la verdad y el juzgamiento de los autores de crímenes en la guerra interna no es un «proceso lineal».

«Por eso España, un país que también ha conocido el conflicto, apoya de manera firme y decidida la labor de esas instituciones», agregó la canciller, al reiterar que Madrid las respalda no solo desde lo político, sino que mantendrá sus contribuciones económicas para su sostenimiento.

«Lo hacemos desde el convencimiento que su labor va a ser fundamental para el futuro de este país; un futuro con el que España se siente profundamente comprometida», agregó la ministra de Exteriores.

El respaldo español a la JEP y al Sistema en general se suma a las manifestaciones de apoyo también expresadas esta semana por la Oficina de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos que reclamó del gobierno de Iván Duque acompañamiento y reforzamiento del mandato de estas instituciones ante los ataques y cuestionamientos a su labor.

La respuesta esta semana del jefe de Estado fue una crítica al manejo informativo de la JEP, a fin de no caer en eventuales especulaciones.

El Tribunal de paz reveló en días pasado que era dos veces superior la cifra de crímenes extrajudiciales cometidos por militares contra civiles, en lo que se ha dado en llamar en Colombia como «falsos positivos», durante 2002 y 2008, periodo que corresponde a parte del gobierno de Alvaro Uribe, mentor político de Duque.