La Crónica Radio Santa Fé

Padre Marino Marín Marmolejo, un sacerdote que saca la iglesia a la calle

Por José Luis Ramírez Morales

En tan solo 21 días el padre Marino Marín Marmolejo se convirtió en una figura de las calles y los parques del barrio Veraguas, del centro de Bogotá, en la localidad de Puente Aranda.

Todos los días se le ve con sotana y sombrero caminando y rezando el rosario, que solo interrumpe para saludar, dar bendiciones y confesar a quienes a esa hora de la mañana se lo solicitan.

Camina despacio, deseando un buen día a los feligreses que a esa hora se disponen salir de sus casas para ir rumbo a sus destinos.

La sorpresa para los residentes del barrio Veraguas ha sido total. Cuentan que desde hace 15 años no veían los feligreses a un sacerdote caminando las calles del barrio.

Hoy, es fácil encontrar al padre Marino Marín Marmolejo en una cafetería, en una tienda, compartiendo con los habitantes, hablando sobre las necesidades, sobre la falta de fe, sobre la seguridad del barrio, llevando una voz de aliento a los enfermos y socorriendo al necesitado.

Nunca se quita su sotana ni su sombrero. Como él mismo dice, con una carcajada, “es mi disfraz”.

Ha comenzado una nueva catequesis en este sector de Bogotá después de dejar consolidada la iglesia San Norberto, en el barrio la Calleja, en el norte de Bogotá, que hizo desde su primera piedra con el apoyo de la comunidad y que se ganó el premio nacional de arquitectura Cemex 2012.

Este sábado tendrá uno de sus primeros encuentros con toda la comunidad del barrio Veraguas, a partir de las 12 del día, en el parque central. Allí se realizará un bazar, en el que aspira a reunir a todo el barrio con la finalidad de recuperar los lazos sociales y fortalecer el tejido de esta comunidad.

La cita es en la carrera 32D con calle 4ª., en el parque que queda frente a la iglesia María Soledad Torres Acosta, patrona de esta comunidad.

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