Se trata de un informe del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, Indepaz, que dice que durante el año 2016 se presentaron 117 homicidios de líderes sociales y defensores de Derechos Humanos.

De la misma manera, la Cumbre Agraria Campesina, Étnica y Popular también reporta que hubo más de 350 amenazas individuales o colectivas, 46 atentados cometidos con armas de fuego o artefactos explosivos y 5 casos de desaparición forzada en contra de dirigentes regionales.

El informe dice que las regiones donde ocurrieron el mayor número de homicidios son el Valle, Cauca y Nariño, donde asesinaron a 57 líderes sociales, un 66,6% del total de las muertes, de estos, 43 fueron en el Cauca, 9 en Nariño y 5 en el Valle.

Aunque el Gobierno asegura que en Colombia no hay paramilitares, el informe señala que: “la presencia de grupos paramilitares se ha incrementado, en especial en las zonas donde hacía presencia las Farc y actualmente las amenazas contra miembros de organizaciones sociales es permanente”.