Opinión

CERO estrés…pero hay que aprender a boxear…

por Mauricio Botero Caicedo
Uno de los casos que más sorprendió al ex – magistrado del Consejo Nacional Electoral, Armando Novoa, fue cuando presentó un informe sobre su gestión. “El CNE solo trabajaba 8 horas al mes”.

Revisó todas las actas, y al hacer pública la información, algunos consejeros se lo tomaron personal y lo retaron a un enfrentamiento físico: “estamos hablando de una pelea a puños como si fuéramos una pandilla de barrio”. En entrevista con Las2orillas, Novoa reprobó la gestión del CNE durante estos cuatro años y dejó en evidencia el clientelismo que lo domina.

Se trae a colación la anterior entrevista, dado que hace una semana el Congreso en pleno eligió a los nuevos magistrados del Consejo Nacional Electoral (CNE), a través del sistema de cifra repartidora, en donde cada uno de los partidos postuló sus candidatos para este organismo electoral. Se trata de Hernán Penagos (Partido de la U), Renato Contreras, Pedro Felipe Gutiérrez (Centro Democrático), Jorge Enrique Rozo (Cambio Radical), Luis Guillermo Pérez (Oposición), Heriberto Sanabria y Jaime Luis Lacouture (Conservador), Doris Méndez y César Abreo (Partido Liberal).

Estos nuevos magistrados estarán acompañados de Pablo Cruz, representante de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (Farc), quien por cuenta del Acuerdo de Paz tendrá una asiento en el organismo electoral con derecho a voz pero no a voto.

Como servicio público me permito informarles a los nuevos magistrados que el nuevo puesto, aparte de ser magnificamente remunerado, les implica CERO estrés. Porque, digámonos la verdad, trabajar ocho horitas al mes por un salario integral de $32 millones de pesos es el equivalente a ganarse la bicoca de $4 millones de pesos por hora! ¡Una verdadera maravilla! ¡Un premio admirable de nuestro Congreso a sus abnegados servidores!

La única desventaja, según el ex – magistrado Novoa, es que muy posiblemente las diferencias entre los magistrados se deben zanjar es a puño limpio. Recomiendo, por lo tanto, a los nuevos magistrados reservar una parte de sus generos emolumentos para tomar clases de boxeo! No quisiera la ciudadanía tener que observar el degradante espectáculo de narices sangrantes a la salida de las reuniones del Consejo Nacional Electoral!