Internacional

Iraq: gobierno aprueba medidas para acabar con protestas

El Gobierno de Iraq aprobó varias medidas, entre ellas ayudas para desempleados, tras una semana de protestas en varias provincias del país, incluida Bagdad, por el desempleo, la falta de servicios públicos y la corrupción que han causado cerca de un centenar de muertos.

Según un comunicado difundido este domingo por la oficina del primer ministro Adel Abdelmahdi, «el Consejo de Ministros emitió la primera cadena de decisiones importantes en una sesión extraordinaria (…) celebrada la noche de este sábado en respuesta a las manifestaciones y el discurso de la máxima autoridad religiosa chií de Irak», el ayatolá Ali al Sistani.

Entre las decisiones se aprobaron ayudas de unos 150 dólares durante tres meses para cada persona de un grupo de 150.000 desempleados y personas sin posibilidad de trabajar, lo que supondrá un costo de unos 65 millones de dólares.

Además, el Gobierno iraquí ha decidido lanzar un programa de formación para 150.000 desempleados que van a recibir otra «donación de 175.000 dinares», que les permitirá entrar en una bolsa de trabajo para ser contratados por empresas de inversión que trabajan en Irak.

También se aprobaron ayudas para la modernización de las instalaciones en mercados a cambio de que los propietarios contraten a desempleados.

Además, se aprobó que el Ministerio de Salud se encargue de «ofrecer atención médica a los heridos de las manifestaciones y las fuerzas de seguridad», y correr con los gastos en el país y «fuera de Irak en casos que sean necesarios».

«Las víctimas de las manifestaciones y de las fuerzas de seguridad se considerarán como mártires (…) para dar a sus familias los derechos y privilegios», figura entre las medidas adoptadas.

La consideración de «mártir» en Irak otorga a las familias una pensión mensual vitalicia.

Las manifestaciones dieron comienzo el martes 1 de octubre y fueron convocadas en las redes sociales por los ciudadanos, que tanto en internet como en las calles exigen mejores servicios públicos, más oportunidades de trabajo y el fin de la corrupción.

Las protestas se tornaron violentas desde el primer día y según el último balance ofrecido hoy por el portavoz de la gubernamental Comisión de Derechos Humanos de Irak, Ali al Bayati, al menos 99 personas han muerto y casi 4.000 han resultado heridas tras cinco días de protestas en el país.