«Lady Gaga es obviamente un fenómeno (…) al público le gustan los ‘freaks’, y si las discográficas ven que pueden hacer dinero con ellos, harán cualquier cosa», dijo el británico a la prensa en una corta escala en México antes de viajar a Bogotá.

El músico, uno de los reyes del acid jazz y el funky, que viste un penacho emplumado en la portada de su último disco, no quiso desmerecer en ningún momento a la provocativa estrella juvenil, pero sí dejo claro que más allá de la imagen, «Jamiroaquai» es sobre todo música.

«No se preocupen, la próxima vez vendremos vestidos con espárragos. Y con tomates también», bromeó con los periodistas a cuenta del comentado vestido hecho de carne que llevó recientemente Lady Gaga.

La banda, que ha vendido 35 millones de discos en todo el mundo, prepara el desembarco de su séptimo álbum «Rock dust light star», que saldrá en noviembre, con su nueva discográfica, Universal Music.

El sexteto se congratuló de la «camaradería» y la buena experiencia que ha sido grabar el disco en directo, tocando todos juntos en lugar de cada músico por separado como es habitual.

«No hay grandes sorpresas, pero si es un disco diferente al anterior», apuntó el cantante. Jay Kay se describió tarareando en el jardín en busca de melodías y afirmó que «parte del proceso es filtrar lo bueno y lo malo».

En el video correspondiente al primer sencillo del disco, «White knuckle ride», el cantante cambia sus sombreros por la parafernalia de piloto de helicóptero, ya que es él mismo quien guía el aparato en las imágenes. Era algo que siempre quiso hacer, dijo.

El grupo ofrecerá un concierto en Bogotá (Colombia) y otro en Sao Paulo (Brasil), al margen de una gira, ya que hasta el año que viene no delinearán su calendario de actuaciones por todo el mundo.

La oportunidad para ofrecer estas dos presentaciones surgió más o menos como pretexto para prepararse antes de la gira.

La banda también expresó que tiene ganas de tocar temas nuevos, no sólo los clásicos («Cosmic girl» y «Space Cowboy», entre otros) que les piden los fans, porque eso acaba robándoles la energía si se repite una y otra vez.

Efe