El presidente de Irán Mahmoud Ahmadineyad culmina hoy miércoles en Ecuador una gira por Latinoamérica que lo ha llevado a visitar también a Venezuela, Nicaragua y Cuba. Ahmadineyad permanecerá en Ecuador solo ocho horas.
Llegará al puerto de Guayaquil en la mañana y se trasladará a Quito después del mediodía para sostener una reunión con el presidente Rafael Correa y conceder una rueda de prensa en el salón Amarillo del Palacio de Carondelet, sede del Ejecutivo.
El mandatario iraní que ha hecho declaraciones como “Israel debe ser borrado del mapa”, enfrenta una creciente tensión internacional, ya que ha sido acusado por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de producir uranio enriquecido utilizado en el uso de armas nucleares.
Gran Bretaña, Francia, Alemania y Estados Unidos acusaron el lunes en Londres a Irán ante la ONU de cometer una “clara ruptura de las resoluciones del Consejo de Seguridad”; mientras las naciones europeas se preparan para un embargo de su petróleo y el gobierno iraní amenaza con tomar represalias bloqueando la ruta de los barcos petroleros en el Golfo.
Washington ha insistido en que Ahmadineyad abandone el “aislamiento internacional” y que “coopere” para alejarse del cerco financiero que le han impuesto Estados Unidos y la Unión Europea (UE). Irán argumenta que con estos viajes busca el fortalecimiento de las relaciones y desarrollar la cooperación en lo político y económico.
“Recuerden que Irán ha avanzado mucho en cuanto a la construcción de hidroeléctricas y refinerías”, argumentó el presidente Rafael Correa el martes al justificar la presencia de Ahmadineyad en Guayaquil y Quito hoy y señaló que en esta ocasión se revisará el proyecto de Refinería del Pacífico, que se construye en la provincia ecuatoriana de Manabí.
Correa, de otro lado, ratificó la posición soberana que el Ecuador mantiene en sus relaciones internacionales, por lo que insistió en que “no permitirá que nos dicten de afuera qué hacer” con las relaciones bilaterales al rechazar consignas de los Estados Unidos contra Irán.
El embajador de Irán en Ecuador, Majid Salehi, dijo ayer a la TV local que “el presidente Ahmadineyad está respondiendo a una visita del presidente Correa en diciembre del 2008.
Sobre el intercambio comercial, explicó que “los empresarios prefieren llevar banano ecuatoriano al puerto Mersin (Turquía) porque desde allí es más barata la transferencia por tierra a Irán, puesto que el territorio es enorme”. “El 90% del banano ecuatoriano que llega al puerto Mersin va al mercado iraní, pero no se registra”, explicó Salehi.
Irán mantiene 42 periodistas presos, según el Comité de Protección de los Periodistas.
El presidente Correa igualmente rechazó las acusaciones de que Irán atenta contra los derechos humanos. “No ven las relaciones que se mantienen con otros países que han botado bombas atómicas y matado a centenas de miles de seres humanos e incluso han invadido otros países. No me vengan con cartas de doble moral”, expresó el mandatario local.
La presencia de Ahmadineyad en Ecuador ha sido rechazada por distintos organismos. El presidente de la Cámara de Comercio de Quito, Blasco Peñaherrera, dijo que no beneficia en nada a Ecuador y aseguró que se pueden cerrar mercados y complicar fuentes de financiamientos.
El director del Comité Empresarial, Roberto Aspiazú indicó que la visita de Ahmadineyad no tiene ningún sentido comercial, como lo quiere hacer ver el Gobierno y sostuvo que según cifras de Proecuador el intercambio comercial con Irán fue menos de un millón de dólares para un total de exportaciones que superó los $ 18 mil millones.
La comunidad GLBT organizada del Ecuador rechazó la visita y anunció un plantón frente a la Embajada de Irán en Quito como protesta a la visita.
