Economía

Murió Don Olimpo López, inventor del Chocorramo

Don Olimpo2A través de un comunicado la empresa más querida por los colombianos Productos Ramos, informó sobre la muerte Don Olimpo López Cáceres, el creador del delicioso Chocorramo, quien a sus 97 años apago su luz para siempre.

El señor Olimpo López, pastelero de productos Ramo, murió este viernes 16 de octubre a los 97 años.

Se fue el hombre que guardaba uno de los secretos gastronómicos mejor escondidos de Colombia, padecía una enfermedad que lo mantuvo alejado de la oficina durante sus últimos días de vida.

Oriundo de Jericó, Boyacá, López también creó el famoso Gansito y el ponqué Gala, aunque es el Chocoramo su firma más representativa en la tradicional compañía.

Su deceso se da un año después del fallecimiento del fundador de Ramo, Rafael Molano, quien murió en el 20 agosto del 2014 a los 90 años.

Olimpo López dedicó su vida al postre más deseado por los colombianos y del que nunca se le pasó por la cabeza se convirtiera en un chocolate esparcible, hasta que el 24 de junio de 2015 la empresa lanzó al mercado el Chocorramo para untar.

Lea aquí el comunicado emitido por la empresa

La Organización Ramo se encuentra de luto por el fallecimiento de su más antiguo colaborador, Don Olimpo López Cáceres, nacido el 24 de junio de 1918 en Jericó, Boyacá.

Don Olimpo murió este 16 de octubre a sus 97 años, en el municipio de Mosquera, de una manera tranquila, después de entregar su vida y corazón a esta compañía y de llevar alegría y amor a las familias colombianas por más de 47 años.

Nos despedimos no solo de un miembro de nuestra familia, nos despedimos de un ícono nacional que encarna los valores de Ramo y las tradiciones de calidad, sabor y frescura de todos nuestros productos.

“Fue una fortuna contar con él durante todo este tiempo. Olimpo siempre fue un ejemplo de compañerismo, lealtad, disciplina y trabajo comprometido. Gracias a él podemos contar muchas historias de éxito que tienen su toque secreto”, dice Germán Martínez, Director General de la Organización Ramo.

Por su parte, la familia Molano agradece profundamente la gran contribución de Don Olimpo, quien dedicó su vida a Ramo, trabajando hasta sus últimos días con el mismo empeño de siempre. Don Olimpo acompañó los grandes logros de la empresa al lado de Rafael Molano de quien fue gran amigo y compañero en los retos empresariales que convirtieron a la Organización en lo que hoy es.

La gran familia Ramo afronta desde hoy el futuro sin la presencia física de Don Olimpo pero con la fortuna imperecedera de contar con sus aportes y enseñanzas que serán por siempre parte del patrimonio cultural y empresarial de Ramo.

Acompañamos a su hijo Olimpo López Gómez, quien continuará con su gran legado en la compañía.»