Opinión

Lenguas nativas de aquí y de allá

Por: Luis Eduardo Forero Medina
Un elemento de los más característicos de una comunidad es la lengua con la que se comunican; en Colombia se hablan 70 lenguas: el castellano, 65 lenguas indígenas, entre las cuales se destaca el wayuunaiki, la lengua nativa del pueblo Wayúu de La Guajira; la Romaní de los gitanos, la lengua de señas colombiana; palenquero, principalmente en San Basilio de Palenque (Bolívar), y creole hablada en las islas de San Andrés y Providencia. En México más de siete millones de habitantes hablan 68 lenguas indígenas; siendo las más comunes Náhuatl, Maya y Tseltal.

En Perú hay 48 lenguas originarias, 40 con alfabetos oficializados, la más hablada es el quechua; en Bolivia la Constitución reconoce 37 idiomas de las naciones indígenas del país, siendo las más usadas el quechua en la zona del altiplano, en el centro y sur del país, y aimara; en Venezuela la población indígena habla 34 lenguas. En Paraguay se emplean 19 lenguas, de las cuales el guaná, angaité, manjúi, sanapaná y el tomárâho podrían desaparecer; en Argentina totalizan quince lenguas indígenas; en Ecuador quedan 14 lenguas indígenas y en Chile sólo 4. En el Triángulo del Norte, en El Salvador, el pipil o nawat es la única lengua hablada originaria; en Guatemala, fuera del castellano, se hablan 25 idiomas, 2 de origen maya. En Honduras se publicó el primer diccionario de las lenguas indígenas y afrohondureñas, único en el mundo; informaron autoridades de la Academia Hondureña de la Lengua. En Brasil, el portugués es el idioma oficial que convive con 180 lenguas indígenas. En el coloso de Suramérica, desde la década de 1980, se ha registrado un significativo avance en la linguística indígena. En América latina sus 42 millones de indígenas hablan más de 500 lenguas, indica el Banco Mundial. La mayoría de indígenas, unos 38 millones, viven en México, Guatemala, Perú y Bolivia.

Considerable número de lingüistas coinciden en señalar que el euskera es la lengua viva más antigua de Europa Occidental; por su parte en EE.UU. de América se hablan 150 lenguas indígenas. Según las Naciones Unidas, en el mundo se hablan 6.700 idiomas, de los que 4.000 son hablados por los 370 millones de indígenas; sin embargo el 95% de las lenguas nativas podrían extinguirse para el año 2.100. En Perú se extinguieron un total de 37 lenguas indígenas y hay 27 lenguas en peligro de declive; en México unas 40 lenguas amenazan con esfumarse; en Bolivia pasaron a la historia tres lenguas. En Uruguay, según los libros de historia, los charrúas se acabaron en 1831. En Colombia, un ejemplo de las lenguas borradas desde el siglo XVIII es el mhuysqhubun, lengua nativa de lo que hoy es Bogotá (Muequetá / Bacatá); fue declarada extinta oficialmente en el siglo XVIII, sin embargo “se niega a desaparecer”. Son palabras de mhuysqhubun Bochica, Bachue, Bosa, Chía, Cota,Chucua, Fontibón, Fusa,Soacha, Suba, Teusaquillo, Tunjuelito, Usaquén, Timiza,Tunja, Zipaquirá,…; indicó la Autoridad Nacional de Gobierno Indígena – ONIC.

Aunque las lenguas están protegidas jurídicamente a nivel internacional, las lenguas se acaban principalmente por falta de enseñanza, prevalencia del idioma de la mayoría del país donde viven los indígenas y la ausencia de transmisión de generación en generación. Los derechos lingüísticos de los pueblos indígenas están garantizados entre otros acuerdos internacionales por el Convenio sobre pueblos indígenas y tribales (n.º 169) de la Organización Internacional del Trabajo, y en el artículo 13 de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas, que establece que estos pueblos tienen derecho a revitalizar, utilizar, fomentar y transmitir a las generaciones futuras sus lenguas, tradiciones orales, sistemas de escritura y literaturas.
El principal método para que los pueblos indígenas fortifiquen sus lenguas surgen de su difusión; en Chile donde de acuerdo con la ONU, a través de El Foro Permanente de las Naciones Unidas para las Cuestiones Indígenas, hay legislaciones y políticas orientadas a la protección de nueve lenguas indígenas, sin embargo solo permiten la enseñanza de cuatro de esas lenguas en los colegios y únicamente cuando hay más del 20 % de estudiantes indígenas. La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, tiene como objetivo garantizar el acceso igualitario de los pueblos indígenas a todos los niveles de educación y formación profesional según la meta 4.5 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
En 2019, declarado como el Año Internacional de Lenguas Indígenas, se busca «llamar la atención sobre la grave pérdida de lenguas indígenas y la necesidad apremiante de conservarlas, revitalizarlas y promoverlas y de adoptar nuevas medidas urgentes a nivel nacional e internacional». En 1994, las Naciones Unidas había proclamado una Jornada Mundial de los pueblos indígenas, y en 2007 adoptó la Declaración sobre los derechos de los pueblos indígenas. En casi ningún país las iglesias traducen sus ceremonias a lenguas indígenas; Francisco aprobó las versiones tseltal y tsotsil de las fórmulas sacramentales, y la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos en Roma, estudia la aprobación de las traducciones del Ordinario de la Misa. La historiadora Carmen Iglesias ha resaltado la tolerancia española hacia las lenguas indígenas y la labor desarrollada por algunos misioneros y predicadores para facilitar su estudio y conocimiento.
@luforero4