El Banco de la República confía en que en el 2010 se cumplan las metas de inflación y de recuperación de la economía, según revelaron el viernes las minutas de la primera reunión del año del instituto emisor.
El pasado 29 de enero, el directorio de siete miembros decidió por unanimidad mantener sin cambios la tasa de interés de referencia en un mínimo histórico de 3,5 por ciento.
El emisor confió en esa reunión en que el aumento de los precios al consumidor por efecto del fenómeno de El Niño será transitorio y que se cumplirá la meta de inflación, de entre 2 y 4 por ciento, en línea con lo que muestran las expectativas del mercado.
«No hay novedades, son tranquilizantes (las minutas) en cuanto la inflación y un poco más positivo en términos de actividad económica», dijo María Paola Figueroa, analista del Banco de Bogotá.
Para la junta, la política monetaria expansiva, derivada de un recorte de 650 puntos base en el tipo de referencia entre diciembre del 2008 y noviembre del 2009, ha permitido una disminución persistente de las tasas de interés de captación y colocación.
«La información disponible muestra que los niveles trimestrales del PIB se siguen recuperando. A lo anterior se suman señales de recuperación de la demanda agregada», aseguraron las minutas.
Juan José Echavarría, uno de los codirectores del banco, consideró el miércoles que no es conveniente recortar nuevamente la tasa de interés, ante las sucesivas disminuciones y a los riesgos inflacionarios derivados de El Niño.
Sin embargo, el funcionario dijo que se sentiría satisfecho con que se mantenga la actual tasa durante el resto del 2010.
El Gobierno estima que la economía de este país andino se expandirá en promedio un 2,5 por ciento este año, luego de que en el 2009 apenas habría terminado en terreno positivo.
«Para el cuarto trimestre de 2009, la mayoría de los indicadores disponibles muestran una expansión de la actividad económica en términos de crecimientos anuales», consignó el documento del emisor.
El Banco Central también destacó que el crédito comenzó a mostrar signos de estabilización después del deterioro producto de la caída en el consumo por la desaceleración económica.
«En algunas modalidades como la cartera hipotecaria y la de consumo, se registran signos de recuperación. En el caso de la cartera comercial, su desaceleración ha sido compensada por el incremento en la colocación de bonos emitidos por grandes empresas», concluyó el reporte.

