El comandante operativo de la Policía Metropolitana de Bogotá, coronel Mariano Botero, aseguró hoy a través de Radio Santa Fe, que los revoltosos que lo golpearon ayer y le causaron algunas lesiones en la cara, la espalda y el brazo izquierdo durante la marcha en inmediaciones de la Universidad Nacional, tenían la intensión de matarlo.

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El oficial dijo que el incidente se produjo a la altura de la calle 26 con carrera 32, cuando decidió bajarse de la patrulla en la que se movilizaba para frenar las agresiones de que estaba siendo objeto la conductora de un vehículo particular.

Añadió que cuando les pidió a los estudiantes que siguieran marchando pacificamente, sin promover actos de violencia, una turba enfurecida se le fue encima y lo atacó a puño y piedra, mientras lanzaba arengas para matarlo.

Añadió que frente a esa situación les dijo: “Si esa es la solución, ¡háganle¡”.

Mientras era agredido, otros manifestantes rodearon la patrulla e impidieron la salida de los dos suboficiales que lo acompañaban.

El coronel Botero consideró que no fue imprudente su decisión de intervenir para evitar los desmanes, pues subrayo que como policía era su deber y su obligación actuar en defensa de la integridad de la dama que era atacada por los revoltosos.

Dijo que al parecer los manifestantes “volcaron su rabia contra mi humanidad”, pero añadió que se alegraba de haber podido actuar como lo indicaba su deber.

“Los dolores pasan”, puntualizó el coronel, quien reconoció que se salvó del linchamiento gracias a la intervención de un joven gestor de convivencia de la Alcaldía de Bogotá, que lo abrazó y logró sacarlo del lugar.

El oficial confirmó que entablará la demanda pertinente ante la fiscalía contra los autores del ataque, que están siendo identificados a través de las fotografías y los registros fílmicos y serán capturados próximamente.

Agregó que previamente se hizo hacer las evaluaciones respectivas por parte de los expertos de Medicina Legal.