Las autoridades confirmaron que 29 reclusos perdieron la vida al desatarse una violenta pelea al interior de cárcel de Santa Cruz, en el este de Bolivia, dejó hoy al menos 29 muertos, incluyendo a un niño que vivía en la prisión.

Además la fuerte gresca, que se registró sobre las 6:00 de la mañana del viernes dejó decenas de heridos de gravedad.

Ramiro Llanos, Director de Régimen Penitenciario de Bolivia confirmó que «la última información que disponemos es que el número de muertos ya son 29 personas. Del total de hospitalizados, hay 35 con heridas muy graves».

Al parecer el enfrentamiento en el centro penitenciario Palmasola inició a raíz de una disputa entre dos grupos de reclusos, que concluyó con el incendio de un sector de la prisión que alberga a unos cinco mil detenidos. Varios cadáveres retirados de la cárcel estaban calcinados, según reportes policiales y de medios locales.

El comandante de la policía local, Jorge Aracena, informó que entre los muertos había un niño que vivía en la prisión con sus padres. «Aparentemente tenemos un niño que está calcinado, pero todo eso tiene que estar establecido de manera plena, por el médico forense», afirmó el jefe policial.

Los canales de televisión difundieron impactantes imágenes de restos calcinados y ambulancias que trasladaban cadáveres y heridos hasta centros hospitalarios, muchos de los cuales amenazaban con colapsar por la cantidad de víctimas. Las autoridades hicieron un llamado a la población para que done sangre.

Al mismo tiempo, se registraban dolorosas escenas de familiares de los presos, tanto en las afueras de la cárcel como en los distintos centros médicos, que reclamaban una investigación de los hechos, al asegurar que las autoridades no proporcionan información y que incluso obstaculizan la labor de la Defensoría del Pueblo.

El centro penitenciario de Palmasola es una cárcel de máxima seguridad, ubicada en las afueras de Santa Cruz de la Sierra, el polo de poder económico en Bolivia.

Santa Fe con agencias