La Fiscalía General anunció este viernes que imputará los delitos de por actos de discriminación, inducción o ayuda al suicidio y falsa denuncia contra persona determinada, a la rectora y a la sicóloga del colegio Gimnasio Castillo Campestre de Tenjo, Amanda Azucena Castillo e Ivonne Andrea Cheque, por sus presuntas responsabilidades en el suicidio del alumno Sergio Urrego.

Urrego, de 16 años de edad, se lanzó de la terraza del Centro Comercial Titán Plaza el pasado 4 de agosto. Un mes después, su familia reveló que su suicidio habría sido por discriminación y ‘matoneo’ por parte de las directivas académicas del Gimnasio Castillo, ya que el joven se había declarado abiertamente homosexual.

La determinación del ente acusador se hará efectiva inmediatamente los sindicatos de la rama judicial levanten el paro que afecta desde hace varias semanas al sector.

Los delitos están referidos a las actuaciones que las dos profesionales realizaron durante periodos previos a la muerte del joven, puesto que consideraron que las conductas de este atentaban contra la norma que prohibía las manifestaciones de amor grotescas.

En el caso de la falsa denuncia, la decisión está basada en que con su actuar estas dos personas habrían sido quienes indujeron a la familia de quien se presume era el amante del joven muerto a presentar una denuncia contra Urrego por acoso sexual el 22 de julio del 2014. Ese mismo día, la rectora del colegio radicó una solicitud de protección en favor del muchacho que supuestamente era víctima del acoso.

Tras registrase la muerte del estudiante, el colegio a través de un comunicado, desmintió la versión de la familia del muchacho , que indica que el joven fue expulsado por su condición homosexual y aseguró que “en nuestra institución se valora y se respeta la condición sexual de todos los integrantes”.

El colegio advirtió que dentro del manual de convivencia se estipula que “nuestros estudiantes se abstengan de manifestar demostraciones afectivas entre parejas, heterosexuales, homosexuales o de cualquier indole dentro de nuestra institución por respeto a los otros estudiantes también menores de edad”.

Señala que no es cierto que algún miembro del colegio “ejerció presión, persecusiones, discriminación, acoso, matoneo o bullying a Sergio David Urrego Reyes” y añade que fueron los padres del muchacho “los que tomaron la decisión voluntaria de retirarlo”.

Tambien afirma que no es cierto que estudiantes del colegio hayan sido sancionados por su asistencia al velorio de Sergio. “Este día solo asistieron dos estudiantes a clase debido a que sus padres no autorizaron su presencia en el velorio”, complementa.