Un equipo del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar rescató un bebé de siete meses que padecía una desnutrición aguda severa y que evidencia una posible neumonía. El menor fue trasladado vía aérea hasta Riohacha para recibir el tratamiento adecuado.

En otro caso, un bebé con esta sintomatología y que requería traslado a centro hospitalario para su diagnóstico y tratamiento, no fue posible porque su mamá no lo permitió y decidió irse de la ranchería.

Por su parte, los miembros de esta comunidad indígena denunciaron ante la directora del ICBF, Cristina Plazas, irregularidades en la entrega de bienestarina líquida, ya que no les está llegando a esta zona.

Plazas anunció que tomarán las medidas a las que haya lugar contra los operadores que debían entregar dicho complemento alimenticio. Si es necesario realizará una intervención.

«Estamos haciendo la verificación de los servicios y yo misma iré a la Fiscalía a presentar las denuncias que recibamos de cada una de las comunidades. Precisamente por eso hicimos los contratos a cuatro meses, para evaluar cómo prestan el servicio. En cuatro meses seguirán solo los buenos operadores que presten el servicio como los niños y las niñas lo merecen», afirmó Plazas.

Mientras tanto, el médico Pediatra Spencer Rivadeneira, quien acompañó la misión del ICBF, pidió a las EPS y a sus colegas que revisen la atención que prestan a estas comunidades.

«Me he dado cuenta que hay falencias en la atención y por eso hago un llamado para que fortalezcamos la atención extramural, porque definitivamente es muy difícil para estas comunidades acudir a Uribia o a Nazareth en busca de esta atención», sugirió Plazas.