Miles de colombianos atendieron el llamado de Ministerio de Justicia y del Derecho y solucionaron por las buenas sus problemas en la Gran Conciliatón Nacional. La jornada, impulsada por la cartera que encabeza Jorge Eduardo Londoño Ulloa, se desarrolló entre el 24 y 26 de noviembre en 224 municipios del país y permitió reconciliar familias, dirimir diferencias entre vecinos, socios y amigos, establecer acuerdos de pago, restituir inmuebles, recuperar predios invadidos, establecer acuerdos de pago y mejorar la convivencia ciudadana.
Según un balance preliminar, más del 24% de los casos atendidos durante la Gran Conciliatón tuvieron que ver con asuntos de familia, siendo la fijación de cuotas de alimentos, custodias, regulación de visitas y medidas de protección para niños, niñas y familias los casos más comunes. Así mismo, se solucionaron cientos de problemas relacionados con títulos valores (letras, cheques) y deudas (24%). La jornada también sirvió para resolver diferencias entre vecinos y comunidades, como en el caso de la urbanización Ciudadela Real del Caribe en Malambo (Atlántico), proyecto de vivienda gratuita en el que se solucionaron problemas de vecindad.
Sin embargo, lo mejor fue que la Conciliatón dejó en evidencia la voluntad de los ciudadanos de arreglar sus problemas por las buenas y a través del diálogo. En Rovira (Tolima), Claudia Carvajal se acercó a la Casa de Justicia para que su arrendatario le desalojara un lote. Su proceso de conciliación tuvo final feliz. “Gracias a Dios llegamos a un buen acuerdo con el señor y todo salió súper bien”, señaló.
De otro lado, en la Casa de Justicia de Montería (Córdoba) los usuarios de la Conciliatón señalaron que se sintieron muy bien atendidos y calificaron como bueno el servicio. “Quedamos satisfechos y agradecidos con la atención que nos prestaron. Planteamos nuestros problemas y llegamos a acuerdos positivos”, indicaron.
Julián Díaz, ciudadano que fue a conciliar en la Casa de Justicia ‘La Nevada’ de Valledupar, señaló que le fue muy bien en su audiencia. “El conciliador nos ayudó a dirimir el problema y llegamos a un acuerdo. Fue una experiencia muy positiva, y lo mejor de todo, gratis”, dijo.
