
Por medio de una videoconferencia, la Fiscalía General le imputó al exgobernador de Córdoba, Alejandro Lyons, cinco años y dos meses de prisión, devolver $4.000 millones y ser testigo estrella en el escándalo del cartel de la toga y la corrupción de contratos en su departamento.
El fiscal tercero delegado ante la Corte Suprema, Jaime Camacho, le formuló los cargos a Lyons por concierto para delinquir, peculado por apropiación y contrato sin cumplimiento de los requisitos legales.
Según con la Fisalía, hay pruebas evidentes de que el exgobernador Lyons se apropió de por lo menos 8.950 millones de pesos de millonarios contratos de las regalías.
Lynons logró un preacuerdo con la Fiscalía en el que se pactó una condena de 5 años y 2 meses de prisión y un principio de oportunidad en el que se compromete a revelar información sobre la corrupción de Córdoba que involucra, entre otros, al senador Musa Besaile en la apropiación de los dineros de las regalías y el cartel de la hemofilia.
Con respecto al congresista Besaile, Lynons señala que como gobernador le entregó $600 millones de los $2.000 millones que pagó al exfiscal Luis Gustavo Moreno para frenar la orden de captura en su contra por parapolítica.
Testimonios y pruebas documentales, le permitió a la Fiscalía evidenciar que en el departamento se desfalcaron por lo menos $10.000 millones al erario de Córdoba en los periodos 2012 y 2015.
la Fiscalía determinó que los objetivos de los contratos nunca se cumplieron y fueron utilizados para actividades diferentes a las que habían sido destinados los recursos.