
Las autoridades llegaron hasta el motel ubicado en el kilómetro 4 de la mencionada, donde se desarrollaba una fiesta clandestina. Los participantes fueron sorprendidos tomando licor y violando el toque de queda.
El comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, general Luis García, señaló que “En los operativos que estamos realizando para controlar la violación de las disposiciones del Gobierno Nacional, encontramos a estas personas en el motel en la fiesta clandestina».
El oficial indicó que las personas allí encontrada «fueron sancionadas por violar el artículo 35 numeral 2 del Código de Policía sobre el incumplimiento de orden del Ministerio de Salud. Igualmente fue sancionado el establecimiento”.
Los indisciplinados fueron sancionados con las multas correspondientes, mientras que el establecimiento fue suspendido durante 10 días.