–El presidente Gustavo Petro volvió a pronunciarse sobre el sonado escándalo de corrupción de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, UNGRD, ahora para responder a declaraciones de prensa del exdirector Olmedo López en las que aseguró que el Gobierno Petro compró al congresista Wadith Manzur, presidente de la Comisión de Acusación, encargada de investigar al mandatario por su fuero.

«Mi gobierno no compra congresistas», comienza diciendo sobre el particular el jefe del Estado en una extensa nota en su cuenta en la red social X. «Son mentirosos los titulares que así lo insinúan. Yo mismo como congresista fui el que le mostró al país como se configuraban los llamados cupos secretos de contratación para congresistas en el DRI y caminos vecinales en el gobierno de Pastrana. Esa práctica no la permito en mi gobierno», puntualiza el mandatario.

Añade que «todos los miembros del gabinete y de entidades públicas del gobierno han recibido instrucción de recibir a los congresistas de acuerdo a sus funciones constitucionales, escucharlos, pero no aceptar de nadie un solo hecho de corrupción».

Además precisó: «Cuando un medio dice «el gobierno de Petro compra congresistas», lo que está indicando es que las prácticas corruptas son ordenadas por mí, y eso en un medio de comunicación o en la boca de cualquier persona es una profunda y vil calumnia, porque jamás, nadie podrá decir que en mi calidad de gobernante o de ser humano he ordenado una práctica corrupta. No defiendo a nadie, no soy Duque, el que la haga se va».

El presidente reitera que «la corrupción de la UNGRD es estructural» y subraya que «es un anillo configurado hace varios años por un cartel de contratistas, políticos y administradores de la entidad».

Explica que el «modus operandis» de la corrupción en la UNGRD «fue continuado lamentablemente en mi gobierno por el director Olmedo (López) «.

Y reafirma lo que ya había dicho en relación con el escándalo: «Yo soy responsable de haber nombrado a Olmedo quien era militante del Polo Democrático de Antioquia y después me acompañó en mis campañas».

Además señala que «al frente de la UNGRD su superior jerárquico soy yo y jamás podrá afirmar que recibió orden mía de comprar congresistas o hacer algún acto de corrupción» y puntualiza:

«Olmedo ha dicho públicamente que está arrepentido y me ha pedido perdón. Le solicito que en su proceso judicial devuelva todo lo que se haya hurtado de dinero público en la UNGRD».

El presidente Gustavo Petro indica que «aún no se como llegó un funcionario militante de la oposición como Snyder a la subdirección de la UNGRD».

A renglón seguido, el jefe del Estado precisa: «La carta que denunciaba a Snyder si llegó al Palacio de Nariño pero no a mis manos. La funcionaria de correspondencia lamentablemente le dio respuesta rutinaria sin trasladar la carta».

Petro reseña que «apenas tuvimos las evidencias de actos de corrupción en la UNGRD, provenientes de la prensa, pedí la renuncia a su director Olmedo».

Igualmente asegura que ha suspendido los contratos firmados por Olmedo o Snyder «y salvado la mayor parte del dinero público».

El presidente Gustavo Petro concluye su escrito enumerando «los mayores hechos irregulares contractuales que encontramos en la administración Olmedo», así:

1. La compra de los carrotanques para la Guajira, denunciada por la prensa. La solución que traté de dar a la sequía en al Guajira no pasaba por la UNGRD: decreté constituir, por el estado de emergencia, un instituto nacional de agua para la Guajira, que lamentablemente en el mes de octubre del año pasado se cayó en la corte constitucional.

2. El contrato de «caregato» en Sucre, por 130.000 millones de pesos, del que dieron adelanto por 20.000 millones

La ruptura de los diques de «caregato» son intencionales y provocan la contratación: así saquean al estado.

Cerca a «Caregato» se encuentran campamentos del Clan del golfo, por lo que pedí que fuera la Armada la que cerrara los escapes de agua y no contratistas particulares que terminan bajo el control del clan.

3. Los contratos que traspasa centenares de miles de millones de pesos a municipios de Santander que no estaban priorizados en las emergencias que habíamos vivido, mientras dejaron abandonadas las víctimas climáticas que se produjeron durante mi gobierno.