–«Puede Antonio García atacarme lo que quiera e intentar matarme si lo desea; muchos revolucionarios han muerto bajo balas del Eln», comienza diciendo el presidente Gustavo Petro en un extenso trino en su cuenta en X, para refutar declaraciones de alias Antonio García, cabecilla del grupo terrorista.

El jefe del Estado advierte que «la historia es la historia y no perdona. La nueva generación del Eln decidió manchar la bandera del Eln con cocaína y ya no la entiende, no sabe que significa» y ratifica:

«Rojo y negro significa Libertad o Muerte y las mafias son la esclavitud contra el pueblo».

Y puntualiza: «Ustedes permitieron que los traquetos levanten la bandera roji/negra y no les importó la sotana de Camilo Torres Restrepo, que aun guardo, la volveré patrimonio nacional y estará en la sala de la revolución de la casa de Nariño donde espero el pueblo llegue».

Agrega que «asociados a los peores traquetos, ustedes usaron sus métodos, asesinaron al campesino, les quitaron sus tierras, los desplazan por decenas de miles, compran al oficial para que no los ataquen, compran al de la guardia venezolana, pero no para liberar al pueblo, sino para esclavizarlo en asocio de sus compinches de México que también asesinan a su propio pueblo».

Afirma además que «su tráfico, el que hace la EFER clandestina hasta del mismo ELN, ha destruido el pueblo de Haití, que nos dio la libertad, esclaviza al pueblo venezolano, que dicen ustedes defender, pero que cada vez se pone más en su contra y esclaviza y asesina al pueblo colombiano del Catatumbo».

Y le dice al cabecilla del grupo terrorista: «Esa es la historia con la que quiso usted morir, renunció usted a la revolución, a la poesía, no se puede hacer poesía matando humildes, y por eso no hay poetas nazis, renunció a Camilo Torres Restrepo y su fe en el amor eficaz, trajo odio y muerte, que es todo lo contrario, en su acción para sabotear la paz mató al ELN revolucionario, a la vida de tantos jovenes entregados por cambiar el mundo, traicionó al campesinado que lo apoyó y que ahora, usted permite que asesinen».

El presidente Petro advierte que «la historia es la que habla y es implacable. Recuerde Bateman que decía: nos pueden perdonar errores, pero no la incoherencia».

Y concluye: «Es en la paz y en el amor eficaz donde esta la revolución, no está en los bolsillos llenos de dólares de sus socios traquetos mexicanos o de cualquier lugar, ellos no son sino el lumpen del capitalismo, Camilo Torres Restrepo era la vanguardia de una nueva humanidad».