–El presidente de EE.UU., Donald Trump, celebró este jueves, de una manera muy peculiar, que la implementación de aranceles a casi todos los países del mundo, que fue anunciada el miércoles, fue un éxito.
«¡La operación terminó! El paciente sobrevivió y se está recuperando. El pronóstico es que el paciente será mucho más fuerte, más grande, mejor y más resiliente que nunca. ¡Hagamos que Estados Unidos vuelva a ser grande!», indicó Trump en una publicación en sus redes sociales.
De acuerdo con NBC News, en el momento de la publicación del mandatario estadounidense, los futuros de las acciones del índice S&P 500 habían caído más de un 3,5 %, mientras que el índice Dow Jones se encaminaba a caer unos 1.300 puntos al inicio de la sesión.
Mientras tanto, seguían las reacciones en el mundo.
El Ministerio de Comercio de China reclamó a Estados Unidos «cancelar inmediatamente» los nuevos gravámenes que «ponen en peligro el desarrollo económico mundial». También anunció que tomarán «contramedidas para preservar sus derechos e intereses». Un portavoz diplomático le urgió a resolver las diferencias económicas y comerciales «a través de consultas justas, respetuosas y recíprocas».
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, celebró que el mandatario estadounidense, Donald Trump, no le aplicara a su país aranceles recíprocos como anunció con decenas de naciones. «Eso es bueno para el país», dijo Sheinbaum en su habitual rueda de prensa matutina. Según la presidenta, esto obedece a «la buena relación» que ha construido con la administración Trump.
México ha sido uno de los países más vulnerables a los aranceles del gobierno de Trump, ya que Estados Unidos es el destino del 80?% de sus exportaciones y su mayor socio comercial, gracias al tratado de libre comercio T-MEC. «La pregunta era: ¿va a sobrevivir el tratado a este nuevo orden comercial? Esa era la preocupación de la presidenta Sheinbaum, desde el principio. Pues sí, sobrevivió», declaró el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, en la misma conferencia del gobierno, conocida como «mañanera».
El Congreso de Brasil aprobó por unanimidad un proyecto que otorga herramientas al Ejecutivo para responder a las barreras comerciales de Trump. La «ley de reciprocidad económica» fue avalada por la Cámara de Diputados, tras recibir un día antes el visto bueno del Senado.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, afirmó en una publicación en la red social X que los nuevos gravámenes estadounidenses pueden ser «un gran error». No obstante, en una segunda publicación, aseguró también que su país -que enfrenta un impuesto aduanero del 10%- puede aprovechar y beneficiarse con esta política de Trump, como el resto de Latinoamérica, produciendo más baratos bienes encarecidos en el mercado estadounidense.
«Vamos a combatir estos aranceles con contramedidas», advirtió el primer ministro de Canadá, Mark Carney, quien consideró que las tarifas estadounidenses «cambiarán fundamentalmente el sistema de comercio mundial» y «afectarán directamente a millones de canadienses».
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, afirmó que los aranceles constituyen un «duro golpe a la economía mundial». También declaró que la Unión Europea está «preparada para responder», aunque aseguró que «no es demasiado tarde» para abrir negociaciones con Washington.
El jefe de Gobierno de Alemania, Olaf Scholz, consideró que las decisiones de Trump son «fundamentalmente erróneas» y «constituyen un ataque contra un orden comercial que ha creado prosperidad en todo el mundo». Como otros líderes europeos, aseguró que el bloque responderá «de manera unida, fuerte y apropiada».
El primer ministro de Francia, François Bayrou afirmó que las medidas de Trump son «una catástrofe» tanto para Europa como para Estados Unidos.
Aunque en su caso los aranceles serán del 10%, el primer ministro británico, Keir Starmer, dijo a empresarios del Reino Unido que las medidas tendrán «un impacto económico, tanto a nivel nacional como mundial».
«La introducción por parte de Estados Unidos de aranceles a la UE (Unión Europea) es una medida que considero mala y que no conviene a ninguna parte», reaccionó la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, en un comunicado por redes sociales. Y prometió «trabajar por un acuerdo con Estados Unidos, buscando evitar una guerra comercial que inevitablemente debilitará a Occidente», agregó.
El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, calificó los aranceles de Trump de ataque «unilateral» contra Europa, llamó a reconsiderarlos y lanzó un paquete de más de 14 mil millones de euros para contrarrestar los efectos en la economía española.
«Amistad significa colaboración. Colaboración significa real y verdaderamente aranceles recíprocos», afirmó el primer ministro de Polonia, Donald Tusk.
«He transmitido que las medidas arancelarias unilaterales adoptadas por Estados Unidos son extremadamente lamentables y de nuevo urgí fuertemente (a Washington) a no aplicarlas a Japón», declaró a periodistas el ministro de Comercio de Japón, Yoji Muto.
El Gobierno de Taiwán considerò «que la decisión (estadounidense) es muy poco razonable y la lamenta profundamente, e iniciará negociaciones serias con Estados Unidos», dijo la portavoz del gabinete, Michelle Lee, sobre los aranceles de 32% sobre las exportaciones de la isla, que no incluye a los semiconductores, uno de los principales bienes exportados por la isla.
«Estos aranceles no son inesperados, pero déjenme ser claro: son totalmente injustificados», expresó el primer ministro de Australia, Anthony Albanese, quien afirmó que «no son el acto de un amigo».
La primera ministra de Tailandia, Paetongtarn Shinawatra, aseguró que su Gobierno tiene un «plan fuerte» para responder a los aranceles de 36% impuestos por Trump a las exportaciones de su país. (Información RT y DW).
