La vida de las víctimas atacadas con ácido cambia radicalmente y, en la mayoría de los casos, los daños sufridos son irreparables.
Para la doctora Alexandra Mora, médica otorrinolaringóloga, especialista en cirugía plástica facial, “las lesiones provocadas por quemaduras con ácidos dejan secuelas y cicatrices muy difíciles de tratar, por tanto no hay garantía de obtener un resultado que permita devolver el rostro tal cual como era antes del ataque”.
A pesar de ello, la doctora Mora indicó que existen tratamientos que pueden recuperar los tejidos y mejorar la calidad de vida de quien fue víctima de estos hechos en los que, en el 90 por ciento de los casos, las mujeres son las protagonistas. Estos, en su mayoría, pueden tardar años.
“El tratamiento de lesiones provocadas por quemaduras con ácido requiere de varios procedimientos como dermoabrasiones, injertos y/o colgajos de piel, que pueden tardarse meses e incluso años en adecuarse dependiendo de la severidad de la lesión”, remata Mora.
