El director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ha informado hoy que el número de hambrientos en el mundo es de 925 millones de personas.
«El número de personas mal alimentadas antes de la subida del precio de los alimentos en 2007 era de 850 millones. Solamente en ese año aumentó en 75 millones por lo que ha alcanzado los 925 millones», dijo Diouf.
El responsable de la FAO hizo esa declaración en un discurso ante las Comisiones de Agricultura y de Asuntos Exteriores del Senado italiano, donde señaló que para hacer frente a esa situación se necesitan 30.000 millones de dólares anuales.
Diouf dijo que el desafío es de «grandes proporciones» e indicó que es necesario «movilizar 30.000 millones de dólares para doblar la producción alimentaria con la que dar de comer a 900 millones de personas».
Para el diplomático senegalés se trata de una «cifra modesta» si se tiene en cuenta que los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) destinan 376.000 millones en sostener su sector agrícola.
Indicó que si a esa cifra se añade el gasto en armamento de esos países, se llega a los 1,2 billones de dólares.
Destacó que tras el aumento de un 12% en el precio de los alimentos entre el año 2005 y el 2006 y de un 24% en el 2007, en los primeros siete meses de este año el índice de la FAO registró un crecimiento del 50%.
Diouf explicó que las previsiones indican que, incluso aunque se mejore la producción de cereal en el mundo, los precios se mantendrán estables en los próximos años y la crisis alimentaria continuará en los países pobres.
EFE
