Economía

El mercado de seguros tiene con qué afrontar el reto del TLC con EE.UU

El TLC con Estados Unidos entra en vigencia este 15 de mayo, mucho se ha hablado de la situación de las empresas agropecuarias en este contexto, pero poco o nada se ha sabe acerca de las normas, implicaciones y efectos de este tratado para la industria aseguradora del país.

Adicionalmente al TLC, se hace necesario tener en cuenta que la ley 1328 del 2009 dicta las normas sobre cómo la industria colombiana en general debe adaptarse frente a la apertura del Colombia al mundo y el mercado globalizado a partir del 15 de Julio del 2013, cuatro años después de promulgada la ley. Dentro de la misma está incluido un capítulo particular para los servicios financieros (Título VII), dentro del cual esta naturalmente el sector de seguros. A partir de entonces se podrá ofrecer y adquirir seguros “internacionales”, dentro de ciertas reglas y condiciones y enmarcado dentro de tres escenarios generales a saber: a) Comercio transfronterizo, b) Consumo en el exterior y c) Presencia comercial en el país a través de sucursales.

Según dicha ley, desde esa fecha, los colombianos podrán comprar diversos seguros en el exterior, salvo las siguientes excepciones:

• Seguros obligatorios: como por ejemplo el SOAT y los relacionados con la Seguridad Social (Plan Obligatorio de Salud, ARP y Pensión de Jubilación).
• Seguros en los cuales el tomador, asegurado o beneficiario sea una entidad del estado
• Aquellos seguros que tengan como pre requisito una protección de seguridad social en Colombia, como por ejemplo, los seguros de salud.

Con esto, algunos han manifestado su preocupación sobre si las aseguradoras perderían buena parte del mercado cuando los colombianos decidan contratar determinados seguros del exterior.

Respecto a esta duda, Eric Dremmer, Gerente Técnico Internacional de Correcol, nos comenta que “esta apertura podría verse como una amenaza para el sector asegurador colombiano, pero consideramos que es más una gran oportunidad de desarrollo y evolución para la industria, más aún si se tiene en cuenta que las principales aseguradoras globales del mercado internacional ya están presentes en nuestro país. En general se podría decir que el mercado de seguros colombiano es moderno y maduro, inclusive a nivel de las aseguradoras colombianas como Suramericana, Bolívar y Colpatria.

En consecuencia, se estima que en el primer momento de la apertura el seguro de vida (individual y/o de grupo) sería uno de los sectores en el cual se sienta la participación de nueva competencia y esta situación conlleve a introducir nuevos productos en el área de Seguros de Personas. En los Seguros Generales o de Daños, no se considera que pueda haber un gran efecto inicialmente, a pesar de que la ley autoriza a ofrecer a las compañías de seguros del exterior productos de seguro especializados tales como transporte marítimo internacional, aviación comercial internacional (casco) y la responsabilidad civil que se pueda derivar de los anteriores, ya que estas líneas de negocio tiene un alto grado de reaseguro “facultativo”, que hace que en la actualidad y desde tiempo atrás tengan un alto de grado internacional.

Dentro de un aspecto ya más jurídico (jurisdicción) los Seguros de Responsabilidad Civil General y aquella derivada del cumplimiento de los contratos, así como las Fianzas, también asociadas a la contratación, no deberían experimentar un gran cambio.

Se preparan para la apertura al mercado
Fasecolda está trabajando activamente frente a este nuevo escenario que se nos avecina el año 2013, para lo cual ha constituido un comité dedicado al análisis y estudio de las implicaciones de la Ley 1328 en el mercado asegurador en aspectos tales como el normativo (reglamentación), el técnico (producto) y el de mercado.

El Gerente Internacional de Correcol nos comenta que en este orden, el gremio de las aseguradoras mantiene conversaciones permanentes con las aseguradoras, el Ministerio de Hacienda y la Superintendencia Financiera para llegar a acuerdos que eviten la competencia desequilibrada de las aseguradoras que entrarían a competir en el mercado nacional vs las compañías de seguros ya establecidas en el país.

“Dentro de los puntos que se han planteado en particular se encuentra el cobro del IVA, los efectos sobre el régimen cambiario y el consumo por Internet”, aclara Eric Demmer.

Efectos en los intermediarios
Con la Ley 1328 también se abre el mercado de la intermediación y en consecuencia podrían llegar nuevos actores internacionales a competir en la prestación de este servicio. Nuevamente destaca aquí el Gerente Internacional de Correcol, que “los grandes corredores globales de seguros ya se encuentran presentes en el país por lo que la gran amenaza sería para las Agencias y los Agentes Naturales de Seguros, por la competencia que se estima se dará en el mercado de Seguros de Vida, como lo hemos comentado anteriormente”. En este aspecto la asociación que aglutina a los corredores de seguros del país – ACOAS trabaja también activamente con sus afiliados y en conjunto con Fasecolda para el estudio de las posibles implicaciones y la reglamentación apropiada para el sector de la intermediación de seguros.

Eric Demmer considera que “si en la actualidad para un programa de seguros técnico y especializado, un cliente corporativo se ayuda en gran medida de los corredores de seguros para una buena asesoría, y ya que la Ley 1328 brindará la posibilidad de adquirir seguros en el exterior, el reto de servicio para los intermediarios de seguros, ya establecidos en el país, será entonces más exigente y diverso, si se quiere mantener al cliente satisfecho: mayor profesionalismo, conocimientos del mercado internacional y manejo de otros idiomas, por citar algunos aspectos”.

Ventajas y desventajas para la industria nacional
En cuanto a qué ventajas tiene la industria aseguradora local frente a los competidores extranjeros, el Gerente Internacional de Correcol señala que “el conocimiento de la normatividad local, los requisitos administrativos, además del idioma español, hace que tanto a nivel de aseguradoras como de intermediario, el extranjero probablemente prefiera en una primera instancia al menos, la asociación con actores locales”.

No obstante, Eric Demmer precisó en señalar que “las aseguradoras y los corredores estadounidenses tienen ventajas tales como productos de seguros más amplios en ciertos segmentos, al tiempo que cuenta con una cultura de seguro más avanzada que la colombiana y esto permite tener tasas más competitivas en algunos casos, que aquellas que se aplican en Colombia”.