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La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, ELN, dejó en libertad este viernes a los dos periodistas holandeses que mantenía secuestrados desde el sábado pasado en la selvática región del Catatumbo, en el noreste de Colombia, informó ese grupo armado.

«Informamos que los dos extranjeros capturados por el ELN en el Catatumbo ya fueron liberados en perfectas condiciones», escribió esa guerrilla en su cuenta de Twitter sin dar detalles del lugar donde se produjo el hecho.

El periodista Derk Johannes Bolt, de 52 años, y su camarógrafo, Eugenio Ernest Marie Follender, de 68, fueron secuestrados en el caserío de Filogringo, que forma parte de la localidad de El Tarra, en el departamento de Norte de Santander.

Hasta ahora ninguna autoridad ha confirmado la liberación de los dos holandeses, aunque medios locales lo dan como un hecho.

El Tarra hace parte de la región del Catatumbo, uno de los bastiones del ELN, grupo que está en negociaciones de paz con el Gobierno en Quito desde febrero pasado.

En la misma zona de Filogringo fue secuestrada la periodista colombo-española Salud Hernández en mayo del año pasado.

Según RCN Radio, los dos periodistas serán trasladados al comando central de la Policía en Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, versión que no ha sido confirmada oficialmente.

Hay que recordar que la delegación en Quito explicó en un comunicado que en la región del Catatumbo, en donde se produjo el secuestro, “la posibilidad de efectuar privaciones temporales de la libertad a personas desconocidas y ajenas a las comunidades, se corresponde con una actitud preventiva, de ejercicio de protección y seguridad, natural para cualquier fuerza insurgente”.

Y dijo en su momento que de confirmar que alguno de sus miembros tiene a los holandeses, “es política del ELN velar por la integridad de las personas, garantizar la libertad de prensa y cumplir con la pronta liberación coordinada con la comisión humanitaria correspondiente”, agregó.

Finalmente, la guerrilla aclaró que “para garantizar la entrega, la fuerza pública no debería interferir agravando la situación con operativos militares contraproducentes”.