
Blindados rusos están destruyendo las instalaciones militares de la Brigada de Artillería del Ejército georgiano en la ciudad de Gori, cercana a la frontera con la región separatista de Osetia del Sur, informó el canal de televisión Rustavi-2, lo que pone en entredicho el pacto de paz logrado ayer entre Rusia y Georgia.
Esas instalaciones habían sido abandonadas por las fuerzas georgianas tras la contraofensiva de las tropas rusas en Osetia del Sur, por lo que Georgia no está oponiendo resistencia.
El secretario del Consejo de Seguridad Nacional de Georgia, Alexandr Lomaya, denunció una incursión de blindados rusos en la ciudad de Gori, que se encuentra a apenas 70 kilómetros al noroeste de la capital georgiana, Tiflis.
Lomaya denunció además que «norcaucásicos están saqueando casas y tiendas» en la ciudad de Gori, tras un bombardeo de las tropas rusas. «Después del ataque, las tropas rusas permitieron la entrada en la ciudad a los norcaucásicos, que saquean casas y tiendas, y humillan a la población», aseguró Lomaya, quien no especificó a qué norcaucásicos se refería, en una comparecencia en la televisión.
Según Rustavi-2, habitantes de Gori cifraron en 50 los carros de combate rusos que entraron en la ciudad en torno a las 10.00 hora local (08.00 hora peninsular española). El alto funcionario georgiano dijo que las tropas rusas no han empleado la fuerza contra la población civil.
El mando de las fuerzas de paz rusas en la región separatista de Osetia del Sur desmintió pocos minutos después las afirmaciones de Lomaya. «En la ciudad de Gori no hay fuerzas de paz rusas ni otras unidades», aseguró un portavoz del mando militar a la agencia rusa Interfax.
Tras cinco días de acciones militares, Rusia y Georgia aceptaron el plan de arreglo del conflicto presentado el martes por el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en nombre de la Unión Europea (UE) y que prevé el retorno de las tropas rusas y georgianas a sus posiciones iniciales.
Las tropas ‘de refuerzo’ rusas en Georgia se replegarán después de que el ejército georgiano vuelva a sus cuarteles, según declaró el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov.
