De esta forma, el referendo para la reelección presidencial, el que propone cadena perpetua para los violadores y el referendo por el agua, se realizarían el mismo día, en tarjetas independientes. Esto generará que se organice una sola jornada electoral y se evite la contratación de personal para tres jornadas electorales.
Así lo planteó el registrador Carlos Ariel Sánchez, bajo el criterio que de esta forma se abaratan costos.
Cada referendo cuesta $ 114 mil millones de pesos, que el Gobierno debe desembolsar en el momento en que se conozca la fecha para su ejecución.